La volatilidad de los mercados lastra los resultados de JP Morgan

El que acaba de cerrarse fue un año dominado por las dudas, lo que se tradujo en gran volatilidad y quebraderos de cabeza en Wall Street. Y eso se va a ver reflejado en los resultados de la gran banca de EE UU. JP Morgan Chase cerró el ejercicio 2011 con una caída del 5% en los ingresos, hasta los 99.765 millones de dólares (77.987 millones de euros), lo que le aportó unas ganancias de 18.975 millones (14.833 millones de euros).

El beneficio anual de la entidad que dirige Jamie Dimon es en todo caso un 9% más alta que en 2010. Pero podría haber sido aún mayor de no ser de una caída en las ganancias del 23% en el cuatro trimestre del año pasado, hasta los 3.730 millones de dólares. En el caso de los ingresos trimestrales, cayeron un 18%, hasta los 21.470 millones de dolares, por el desplome en la banca de inversión.

Dimon, presidente ejecutivo, dijo en un comunicado comentado los resultados que los retornos son "razonables teniendo en cuenta el ambiente" dominante en los mercados financieros, arrastrados por la crisis de la deuda soberana en Europa y el temor a una recaída en el recesión en EE UU. Pero en el caso del cuarto trimestre, se declaró "decepcionado", aunque "modestamente".

La economía, según Dimon, continuará recuperándose a los largo de 2012, al menos en EE UU. Eso, señala, se traduce en una mejora en la demanda de préstamos y en la calidad del crédito en la división de banca comercial y la de negocios. Las cargas vinculadas a su cartera hipotecaria se redujeron en un 43% en el cuarto trimestre, comparado con el mismo periodo de 2010.

La marcha del sector de la vivienda seguirá siendo un punto clave para la marcha del sector financiero durante el año que acaba de comenzar. JP Morgan Chase presume en cualquier caso de tener un balance que es una "fortaleza". Y ante continuo ataque político al sector financiero, Dimon insiste que el trabajo de la entidad está teniendo un "impacto positivo en la vida de millones".

JP Morgan Chase es la firma financiera más grande de EE UU, tras superar en el tercer trimestre en volumen de activos a Bank of America, que se está desprendiendo de algunas inversiones con las que dotarse de efectivo para reforzar su colchón de capital. El resto de grandes bancos de Wall Street presentará resultados trimestrales y de cierre de ejercicio la semana que viene.