La inflación se encauza tras un año de precios descontrolados
El descenso del petróleo y de los alimentos rebaja el índice armonizado con la zona euro del 4,6% al 3,6% en un mes
La inflación ha vuelto al punto de partida en el que arrancó un año de excesos. Según el adelanto del IPC armonizado con la zona euro, los precios subieron en octubre un 3,6%, la misma tasa anual que reflejaba ese mes en 2007. No ha sido un año cualquiera: la depreciación del dólar, el aumento de la demanda por economías emergentes y el efecto multiplicador de los especuladores pusieron al rojo vivo los mercados de materias primas. Ahora, el colapso financiero y el parón económico derriten la bola de nieve. Y la presión inflacionista afloja.
La escalada sin freno en las materias primas, que llevó al barril del petróleo a superar los 147 dólares (93 euros) y a provocar una crisis alimentaria en varios países en desarrollo, tocó cumbre a principios de verano. En paralelo, el repunte de los precios en la economía española, dependiente de las importaciones del petróleo y con problemas de competitividad en el sector de la distribución, fue intenso. En julio, el IPC llegó al 5,3%, la mayor subida en un cuarto de siglo. En agosto y septiembre, el alza de precios empezó a moderarse, una tendencia que ahora se acentúa.
"Datos como éste van moviendo un poco el cotarro", afirma Solbes
Para encontrar un frenazo similar en el índice armonizado, que se utiliza para facilitar la comparación con el resto de la zona euro, hay que retrotraerse a julio de 2001. En la serie del IPC (hay variaciones mínimas con el índice armonizado), no se refleja una moderación parecida desde el verano de 1992, cuando la recesión económica ya despuntaba.
"El dato de inflación es excelente, son noticias como ésta o la bajada del Euríbor las que van moviendo un poco el cotarro", afirmo el vicepresidente del Gobierno, Pedro Solbes. "Es lo que necesita el país para cambiar la actual situación de apatía en la que se encuentra por una de mayor optimismo", añadió en declaraciones a RNE.
El principal responsable económico del Ejecutivo consideró que la moderación de precios en octubre se debe, a partes iguales, a la caída de los combustibles y de los alimentos. Es decir, que en el último mes, los productos derivados del petróleo y los cereales que se consumen en el mercado español habrían empezado a reflejar la drástica corrección de precios que se está produciendo en los mercados de futuros de las materias primas desde el verano.
El barril de brent (el crudo de referencia en Europa) se cotizó a un promedio de 55 euros en octubre, un nivel ligeramente inferior ya al que marcaba en el mismo mes de 2007. En julio, hace sólo tres meses superaba los 90 euros.
Retrocesos similares o más marcados aún se han producido en los mercados internacionales de cereales. El trigo retrocede un 55% desde su máximo anual, el maíz cae un 50% y la soja se deja un 45% en poco más de cuatro meses.
El pendulazo de las materias primas es la explicación básica de la moderación de los precios. Pero a partir de ahora, el parón de la actividad económica y la atonía del consumo tomarán el relevo, lo que lleva a expertos a vaticinar tasas de inflación cercanas al 1% en 2009, inéditas en las últimas décadas. Solbes apuntó que esa circunstancia da más margen aún al Banco Central Europeo para bajar los tipos de interés, una reclamación unánime entre los Gobiernos de la zona euro.
"La inflación es todavía muy elevada, estamos en un momento de práctica recesión, no se vende nada", sostuvo el portavoz económico del PP en el Congreso, Cristóbal Montoro, que abogó por un gasto público más contenido para poner bajo control los precios.
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