_
_
_
_
La crisis del euro

Moody's coloca la calificación de Bankia a dos escalas del bono basura

El sector cree que entidades españolas suspenderán en los test de resistencia

Íñigo de Barrón

Los analistas de la agencia de calificación crediticia Moody's estuvieron ayer muy activos: no solo irrumpieron en los mercados con la calificación de Portugal sino que también se convirtieron en protagonistas de la salida a Bolsa de Bankia.

Moody's calificó por primera vez a la entidad controlada por Caja Madrid y Bancaja y le otorgó una nota de Baa2, que describe una calidad crediticia aceptable y un riesgo de crédito moderado, pero con perspectiva negativa. Esta calificación supone situarla a dos pasos de lo que se considera bono basura por el riesgo de impago. Moody's también calificó a la matriz, el Banco Financiero y de Ahorros (BAF), con una nota una escala más baja: Ba2, igualmente con perspectiva negativa.

Con las provisiones anticrisis realizadas, bancos y cajas mejorarían su nota
Más información
Europa embiste contra las agencias de riesgos tras el castigo a Portugal
Moody's rebaja la calificación de 30 bancos y cajas españoles
Moody's cree que 26 entidades europeas suspenderán las pruebas de esfuerzo

Bankia aclaró que la perspectiva negativa está en línea con la que otorga la agencia a España y a todo su sector financiero, independientemente del nivel de rating de cada entidad.

La agencia de calificación considera que la base de capital de Bankia es vulnerable a pérdidas en el mercado y en el negocio inmobiliario, que pueden durar bastante tiempo, en su opinión. Estas circunstancias pueden impedir el crecimiento del negocio de Bankia y presionar sus márgenes a la baja, dice la agencia.

En la parte positiva, resalta que todavía no se han reflejado los ahorros de costes de la fusión, que beneficiarán a la entidad cuando se materialicen. También considera Moody's que mejorará la financiación de Bankia cuando esté cotizada. Destaca que la separación del banco malo en BFA ha dejado más limpio a Bankia. Sin embargo, Moody's recuerda (como hizo en una nota anterior) que Bankia se podría ver afectado por los potenciales problemas de los activos malos y por su falta de liquidez. Incluso no descarta que BFA necesite "saneamientos adicionales".

Otra de las agencias de calificación, Fitch, también rebajó la nota al Banco Popular, al que le bajó un escalón, hasta el notable bajo en la deuda a largo plazo. Mantuvo en revisión negativa la nota de la entidad, con lo que podría recortarla más. Fitch degradó en la misma proporción la deuda de la filial portuguesa del Popular. Ambas están catalogadas como A-, de buena calidad. La razón de la bajada es la debilidad económica de España y su exposición al ladrillo.

Peor le fue a Bankinter. Fitch rebajó dos escalones hasta un aprobado alto, BBB+, porque se endurecen sus condiciones de financiación.

Por otro lado, todos los ojos están puestos en las pruebas de resistencia de la banca europea, que se harán públicas a finales de la semana que viene. Según fuentes del mercado, otra vez habrá suspensos entre las entidades españolas porque no se han admitido como capital las provisiones anticíclicas. Estas dotaciones son las que impuso el Banco de España al sector en los buenos años como colchón para afrontar pérdidas futuras. Han sido alabadas internacionalmente y se tomarán como ejemplo para la reforma de Basilea III.

El supervisor negocia que la autoridad bancaria europea (EBA, por sus siglas en inglés), destaque en las pruebas que si se contabilizaran las citadas provisiones (ya desembolsadas), las notas de las entidades mejorarían considerablemente. En las pruebas de hace un año, suspendieron cinco cajas.

Las pruebas, que han sido objeto de polémica por las ingerencias políticas de los Gobiernos para evitar suspensos de las entidades, deben medir cómo quedará el capital ante una hipotética recesión de dos años más, en el caso de España. El aprobado será un 5% de capital. La depreciación de la deuda pública española es un factor que ha castigado la nota de las cajas. Moody's cree que de las 91 entidades, podrían suspender 26.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_