JPMorgan evita que Bankia caiga en su estreno en Bolsa
El banco logra mantener el precio de la oferta tras llegar a perder el 6% - Rato: "Salimos en plena tormenta perfecta"
No fue un estreno alegre. Mientras Rodrigo Rato, presidente de Bankia, pronunciaba el discurso de apertura de cotización, las acciones no dejaron de caer, pese a que la Bolsa tuvo una jornada animada, con subidas durante todo el día, especialmente para los bancos. Al final de la sesión, y tras llegar a caer un 6,4%, Bankia cerró al precio de la oferta (3,75 euros) gracias al apoyo de JPMorgan, uno de los colocadores. Bankia captó 347.338 accionistas individuales y 280 institucionales.
El viejo parqué de la Bolsa de Madrid estaba a rebosar de banqueros de inversión, consejeros, ejecutivos de Bankia, inversores, medios de comunicación y curiosos. Pero no hubo brindis oficial: Rato, que ha invertido 250.000 euros, saludó a los presentes con el pulgar hacia arriba. Poco antes había reconocido: "Lo hemos conseguido. Hemos salido y eso es un punto de referencia para todo el sector bancario, pero lo hemos hecho en mitad de una tormenta perfecta en los mercados".
El presidente de la entidad destacó: "Solo estar aquí ya es un gran éxito"
Precisamente el hecho de ser una pieza angular para el sistema financiero ha propiciado que cuente con el apoyo de otros bancos, como el Santander y el Popular; cajas, como La Caixa, o aseguradoras, como Mapfre y Mutua Madrileña. Todos ellos se han hecho accionistas. Pero en la jornada bursátil de ayer los protagonistas fueron los banqueros de inversión que han participado en la colocación porque trabajaron con intensidad para evitar que se hundiera el valor.
En los primeros minutos de negociación la caída fue del 3,1%. Luego el descenso llegó al 6,4%, cuando las acciones bajaron a 3,51 euros. A partir de ahí se fueron recuperando para cerrar, en el último segundo, al precio de colocación. La rebaja del 15% sobre el precio mínimo anunciado no fue suficiente para frenar el descenso. Algunos inversores comentaron que la presión por colocar acciones había sido muy alta, por lo que muchos inversores decidieron deshacerse de ellas con rapidez.
Los bancos colocadores más activos fueron JPMorgan, Deutsche Bank y la propia Bankia. Al final de una jornada, en la que se movió un 9,6% del capital del banco, JPMorgan, la entidad encargada de estabilizar el valor tras la salida a Bolsa, acaparó el 64% de las compras al adquirir 44 millones de títulos. Al mismo tiempo, dada su condición de intermediario, también vendió otros 30 millones de acciones por encargo de sus clientes, un 40% del total. El saldo neto del banco estadounidense es que ha adquirido 14 millones de títulos de Bankia en su primer día de cotización. JPMorgan acaparó más de la mitad de las transacciones.
El alivio era común en los rostros de los colocadores presentes en la Bolsa. "Objetivo cumplido", decían. Pero ahora falta la segunda parte de la misión, donde ellos ya no participarán: que Bankia cotice sola, que cumpla los objetivos de resultados prometidos a los inversores y que sea una buena inversión.
Rodrigo Rato comentó ante los medios que Bankia "es una inversión sólida con un recorrido al alza en beneficios por la reducción de costes y la mejora de los márgenes". "Estar hoy aquí es en sí mismo todo un éxito". El presidente dijo que aceptaban el "este reto exigente porque estamos acostumbrados. Ahora que estamos cotizando nos vamos a focalizar con los objetivos de los inversores y de los accionistas". Negó que se hubiera malvendido Bankia y pidió que la cotización se pusiera en relación con sus competidores. "La salida hace más fuerte a nuestra entidad y nos consolida como líderes en España", concluyó.
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