La Bolsa italiana celebra por adelantado una eventual dimisión de Berlusconi
El parqué de Milán cierra con una subida del 1,32% en contraste con las pérdidas del resto de Europa por el rumor desmentido de que Il Cavaliere iba a dejar el Gobierno. -La prima de riesgo italiana marca un máximo y la de España se acerca a los 400 puntos básicos
El simple rumor de que el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, podría dimitir ha sido suficiente para invertir el ánimo de los inversores europeos y decidir el destino de cientos de millones de euros que, hasta que ha empezado a correr el comentario sobre el jefe del Ejecutivo italiano, estaban saliendo de las Bolsas europeas por las dudas que, precisamente, venían del país transalpino. Pese a que el propio aludido ha desmentido la posibilidad de una salida precipitada del poder, la principal plaza financiera de Italia, la Bolsa de Milán, ha acabado la sesión avanzando un 1,32% en una jornada en rojo para el resto de índices de referencia del Viejo Continente. En la deuda, la presión contra Italia ha marcado nuevos máximos y su prima de riesgo ha tocado niveles desconocidos en los últimos 16 años.
El rumor ha surgido a media mañana a raíz de los comentarios de dos periodistas cercanos a Berlusconi, Giuliano Ferrara, director del rotativo Foglio y exministro del jefe del Ejecutivo, y Franco Bechis, vicedirector del periódico Libero. El primero ha dicho en la página web de su publicación que la dimisión es "cuestión de horas, algunos incluso hablan de minutos" tras afirmar sin ambages "que está claro que Silvio Berlusconi va a dimitir". El segundo también ha asegurado a través de su perfil en una red social que la decisión se hará pública en la noche del lunes o en la mañana del martes.
A pocos minutos de las 13.00, la oficina del primer ministro ha asegurado a la agencia de noticias italiana ANSA que los rumores sobre su eventual dimisión son "infundados". Berlusconi lo reiteraba en su propio perfil en otra red social: "Son infundados", aseguraba. Mientras, el líder de su grupo parlamentario (PDL) insistía en un comunicado, este remitido por correo electrónico, que el Il Cavaliere le había asegurado "hace pocos minutos" que los rumores sobre su salida del Gobierno no tenían base alguna. La Bolsa milanesa, sin embargo, ha hecho oídos sordos al desmentido y seguía subiendo con fuerza tras el comunicado hasta la hora de la comida, cunado sí ha empezado a desinflarse. A las 14.30 avanzaba un 1,3% frente al 2,3% registrado a mediodía.
"Es el rumor sobre Berlusconi lo que ha permitido moderar las pérdidas. Los mercados estaban bajistas por las dudas sobre Italia, por lo que el único motivo para un rebote tenía que venir de Italia", ha explicado a Reuters David Thebault, directivo de la firma de inversión Global Equities desde París.
Nuevo máximo de la prima de riesgo
En los mercados de deuda, el rumor ha pasado desapercibido. Así, la presión contra los bonos italianos empeoraba hasta marcar nuevos máximos. Una vez abatido Yorgos Papandreu del Gobierno de Grecia -tal y como antes sucedió con Brian Cowen en Irlanda y José Sócrates en Portugal-, la desconfianza de los inversores ha pasado a centrarse ahora en los problemas de Berlusconi para sacar adelante las reformas y ajustes pendientes. Junto al retraso que acumula su Gobierno a la hora de sacar la tijera, las débiles perspectivas de crecimiento y el lastre de su deuda también juegan en contra del dirigente italiano, que ha perdido la mayoría en el Parlamento italiano ante la creciente oposición que está encontrando entre sus socios de Ejecutivo y correligionarios del PDL.
Este incremento de las dudas se ha traducido en un aumento de la rentabilidad exigida a los bonos italianos a 10 años hasta superar el 6,6%, con lo que ha alcanzado niveles desconocidos no solo desde que el país ingresó en la zona euro en 1999, sino que hay que retrotaerse hasta 1995 para encontrar tipos igual de altos. Con la subida, que ha tenido lugar pese a que fuentes del mercado han indicado a Bloomberg que el Banco Central Europeo está volviendo a comprar hoy su deuda en el mercado secundario -donde se negocian los títulos una vez emitidos-, los títulos a 10 años se aproximabam a la cota del 7% que marcó el punto de no retorno para los rescates de Grecia (mayo de 2010), Irlanda (noviembre de 2010) y Portugal (el pasado abril).
No obstante, a diferencia de los casos anteriores, acudir en ayuda de la tercera economía del euro dejaría sin recursos el fondo de rescate del euro, recientemente ampliado de palabra hasta superar el billón de euros -aunque ahora tiene que conseguirlo de hecho, algo que se acontece más difícil-. Además, por aquello del efecto contagio, aumentaría la presión contra España, que desde agosto ha cedido al país transalpino el puesto de siguiente posible víctima de la crisis fiscal del euro.
Con este repunte del interés en los bonos, la prima de riesgo italiana, que es el sobreprecio solicitado para comprar estos títulos frente a los alemanes, de referencia por su estabilidad, marcaba también nuevos máximos en los 491 puntos básicos (37 más que el viernes). Berlusconi afronta mañana una decisiva votación sobre los presupuestos y las reformas pendientes. La votación es vista como una moción de confianza contra Il Cavaliere, que tiene complicado sacarla adelante por el traslado de otros dos de sus diputados a la oposición. Ante los rumores de dimisión, sin embargo, la prima ha bajado a 470 puntos básicos pero la abundancia de órdendes de ventas sobre sus bonos la ha vuelto a dejar sobre los 480 al cierre de las Bolsas.
Los bonos a 5 años superan a los de 10
En otro signo del fuerte incremento de las tensiones sobre los bonos italianos, la rentabilidad exigida a su deuda a menor plazo, en concreto a 5 años, ha superado el interés de la que tiene vencimiento a 10 años (6,699% contra un 6,662%). Italia tiene la segunda deuda más elevada de la UE con un pasivo equivalente al 120% de su PIB, lo que incrementa a marchas forzadas su vulnerabilidad ante el acoso de los inversores y convierte en insostenible financiarse a estos tipos prolongados en el tiempo. Aunque el interés récord lo ha marcado en el mercado secundario, estos intereses acaban trasladándose más tarde o más temprano al primario, donde el Tesoro italiano acude a realizar las emisiones.
El ascenso de los intereses reclamados para apostar por la deuda del país, lo que se traduce en un descenso de su precio, pone de manifiesto que los mercados esperan a la defensiva el desarrollo de los acuerdos alcanzados en las últimas semanas sobre la crisis del euro. Sobre este punto, esta tarde hay reunión del Eurogrupo y el FMI para cerrar el segundo rescate de Grecia mientras, en Italia, el FMI se sumará a la Comisión Europea en las tareas de vigilancia de las reformas anunciadas por Berlusconi.
En Bruselas también esperan las explicaciones del ministro de Economía italiano, Giulio Tremonti, sobre los avances en el país. Berlusconi y Tremonti hace meses que perdieron la sintonía en paralelo al acercamiento del segundo a los planteamientos de la ultraconservadora Liga Norte. Según ha avanzado esta mañana el portavoz económico de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj, la UE espera de Roma más concreción sobre "el calendario de aplicación", los "planes de acción" y el "impacto presupuestario de las medidas" propuestas para reducir el déficit y devolver la sostenibilidad a las cuentas del Estado italiano.
Para España, el aumento de las dudas sobre el conjunto de la eurozona se ha traducido también en el aumento de la prima de riesgo. Por la mañana ha llegado a rondar los 390 puntos básicos, 12 más que el viernes y cada vez más cerca del máximo histórico que marcó en agosto sobre los 400 puntos básicos. La rentabilidad de los bonos españoles a 10 años se iba sobre el 5,66%. El acoso de los inversores se saldaba a su vez con subidas en el diferencial de Bélgica (264, 9 más, aunque por la tarde ha llegado a bajar) y Francia (131), que hoy ha anunciado que refuerza sus medidas de ajuste. En estos niveles, se mantienen en las cotas de récord que alcanzaron a finales de la semana pasada.
"España está sufriendo el efecto de Italia, como el resto de los bonos europeos. Lo bueno de esta situación es que el mercado está diferenciando cada vez más a España de Italia cuyos diferenciales (entre sí) también se están ampliando", ha explicado a Reuters Estefanía Ponte, economista de Cortal Consors.
Pérdidas moderadas en las Bolsas
En las Bolsas, la semana ha empezado en rojo pero las pérdidas se han moderado tras la entrada en verde de Milán. Bajando al detalle, la identificación de los bancos considerados como sistémicos (los demasiados grandes para caer) durante la cumbre del G-20 de la semana pasada, cuyas conclusiones no han sido muy bien recibidas por el mercado a tenor de lo que ha sucedido hoy, se ha saldado con importantes pérdidas en todo el sector europeo.
Frente a las subidas de Milán, París ha cedido 0,67% y los bancos BNP Paribas o Société Générale han perdido un 2,48% y un 2,40%. En Fráncfort, los números rojos se han quedado en el 0,61% con un retroceso del 1,91% en el Commerzbank y del 1,40% en el Deutsche Bank. Mientras, en Londres, el FTSE 100 se ha depreciado un 0,30%.
El español Ibex 35 se ha quedado como farolillo rojo de Europa con un descenso del 1,4%, con lo que mañana volverá a abrir por debajo de los 8.500 puntos. Entre sus nombres propios, Santander, que sí está entre los bancos que deberán reforzar su capital de forma adicional al entrar dentro del colectivo de sistémicos, y BBVA, que se ha quedado fuera, han perdido un 2,44% y un 0,91%. Sin embargo, el protagonista del día ha sido Telefónica, que ha repartido un dividendo de 0,77 euros, lo que ha motivado un recorte del 0,60% en sus acciones para ajustar su valor. En total, el operador ha abonado 3.500 millones de euros a sus accionistas.
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