Bélgica acelera los ajustes para reducir el déficit "pase lo que pase"

Bélgica ha acordado hoy anticipar el inicio del curso político para acelerar la aprobación de las medidas europeas destinadas a frenar la crisis de la deuda y ha reafirmado su intención de rebajar el déficit presupuestario del país por debajo del 3% "pase lo que pase". En un consejo de ministros reducido se ha analizado hoy, vía teleconfeencia, la situación en los mercados y en las cuentas de Bélgica.

"Hay un compromiso de todas las formaciones políticas" para que el déficit público se mantenga por debajo del 3,6 % este año y del 3 % el próximo, según ha dicho el viceprimer ministro y responsable de Finanzas, Didier Reynders, a la agencia de noticias Belga.

Bélgica, con una elevada deuda pública y tras más de un año con un gobierno en funciones, se ha visto sometido en los últimos días a las presiones de los mercados, aunque sin llegar al nivel de otros países del euro como Italia y España. Así, su prima de riesgo, que es el sobreprecio exigido a sus bonos frente a los alemanes, de referencia, llegó a tocar la semana pasada un récord en los 231 puntos básicos. Hoy, sin embargo, mejoraba hasta los 203 gracias al tono positivo que predomina en los mercados de deuda a raíz de la intervención del BCE.

Ante las turbulencias en la eurozona, Bruselas se ha comprometido además a acelerar la adopción de los acuerdos alcanzados en la cumbre de la UE del 21 de julio, en la que se definieron los detalles del segundo rescate a Grecia y se concedieron más poderes al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) para que pueda prevenir, recapitalizar bancos y comprar bonos en el mercado secundario.

Así, las dos cámaras del Parlamento belga celebrarán una reunión conjunta antes del final de agosto (mes sin actividad parlamentaria habitulmente), para permitir una reunión de la comisión de finanzas que ratifique las decisiones en la semana del 5 de septiembre.

Mientras, el gobierno permanece a la espera de un último análisis del Consejo de Estado sobre las implicaciones de esos cambios para el país. Dentro de todo este esfuerzo, Reynders informó a la agencia Belga de que tiene previsto reunirse el próximo día 16 con bancos y aseguradoras belgas para discutir su participación en el rescate griego.