El argentino criado con comida paraguaya

Lucas Barrios nació en San Fernando, provincia de Buenos Aires, un día de noviembre de 1984. Es argentino, se crió como un argentino más pero su madre sólo le prepara comida paraguaya y juega con Paraguay. Es su primer Mundial y hoy debutará frente a Italia. Hace tan sólo un par de meses, el delantero de 25 años del Borussia, esperaba en su casa de Dortmund una llamada de Diego Armando Maradona. "Tenía una remota esperanza de que haciendo un buen campeonato en Europa le llamarían de la albiceleste. Él sabía que era muy remota, por eso cuando vio que había tanta competencia y tan joven optó por la nacionalidad paraguaya", cuenta por teléfono Luis Mena antiguo compañero de Barrios en el chileno Colo Colo.

Barrios obtuvo el pasaporte paraguayo a finales de marzo. Su camino hacia Sudáfrica empezó hace menos de tres semanas. Debutó a las órdenes de Gerardo el Tata Martino el 25 de mayo en un amistoso contra Irlanda. Se estrenó con gol. Y no ha parado: volvió a marcar contra Costa de Marfil y contra Grecia. Tres goles en tres partidos. Su racha goleadora ha servido para que no se note la ausencia de Cabañas (tiroteado el pasado mes de enero en México) pero no para placar las polémicas alrededor del seleccionador. Martino es argentino y bajo su mandato son ya cinco los argentinos que se han nacionalizado paraguayos. Tres de ellos, además de Barrios, están en el Mundial.

"Ahora sos uno más de nosotros", le dijo Domingo Salcedo, paraguayo y compañero también en el Colo Colo. "Siempre me hablaba de Paraguay, me preguntaba cosas del país, pero a la vez me vacilaba presumiendo de ser argentino... Así que cuando consiguió el pasaporte me salió del alma decirle 'sos uno más de nosotros", cuenta Salcedo al otro lado del teléfono. La madre de Barrios es paraguaya y se marchó muy joven a Argentina. "Lucas ha crecido con costumbres argentinas pero la mamá siempre se ha encargado de que en la mesa solo hubiera comida paraguaya. Nunca le han faltado sopa y chipa [pan de harina de maíz parecido a las arepas colombianas]", recuerda Salcedo que añade: "ahora solo le falta que se deje de cumbia argentina y se pase a la polca paraguaya".

Barrios tiene seis hermanos pero heredó la pasión por el fútbol de su primo, Marcelo Cáceres que le paseaba como mascota en su equipo. Entró en Huracán donde poco después dejaron de contar con él porque le consideraban demasiado pequeñito para el fútbol. Su padre le impidió tirar la toalla y el chico recaló en Argentinos Juniors. De allí se marchó luego al Colo Colo donde marcó 57 goles en 67 partidos. Ahora de pequeñito no tiene nada: mide 1,87. "Ha adquirido confianza y se ha convertido en un ganador. En Colo Colo explotó definitivamente. Tiene el físico ideal para el 9 clásico. Es ágil, rápido y técnico. Vive un momento goleador que no es ninguna casualidad", explica Hugo Tocalli que le seguía desde Argentinos Juniors y le tuvo un par de meses en Colo Colo antes de que saliera rumbo a Dortmund en verano de 2009.

En el Borussia esta temporada ha marcado 19 goles, a tan solo tres del pichichi Dzeko. "El entrenamiento europeo le ha dado lo que le faltaba: fuerza. Está más potente y más formado físicamente. Es un punta que siempre está en el momento justo, tanto que pilla cualquier rebote", dice Salcedo. "Es un gran delantero, un goleador de estirpe, tiene el arco entre ceja y ceja e impone respeto al portero", le hace eco Mena.