Cantes de un exilio interior
Es veraz y directa, tiene aspereza y desgarro, la captura por la cámara documental de la cineasta francesa Dominique Abel de las gentes y las atmósferas de donde surgen cantes gitanos en las tabernas de las Tres Mil, el barrio del Polígono Sur sevillano, donde fueron a parar a finales de los años sesenta las familias gitanas expulsadas de su Triana, donde vivían desde hacía casi medio milenio.
Dentro de las austeras imágenes de Polígono Sur laten, ciertamente por debajo, estas viejas cosas cordiales y trágicas. Pero quizás se mueven demasiado por debajo, porque sus latidos no se perciben bien, quedan distantes y difusos, muy al fondo, casi silenciados. Y, sin embargo, es importante, y probablemente hubiera sido necesario para entender hasta el fondo las imágenes arrancadas por Dominique Abel del ámbito casi carcelario de esta barriada sevillana, y para medir la hondura y el calado de las músicas gitanas que nos propone, saber que ese mundo urbano es el territorio de un trágico exilio interior.
POLÍGONO SUR
Directora: Dominique Abel. Intérpretes:Rafael Amador, Juana y Martín Revuelo, Ramón Quilate, Bobote, Caracafé, Pelayo, El Varilla. Género: documental. España, 2003. Duración: 100 minutos.
En Polígono Sur se canta y se habla mucho de ahora, pero se echa de menos una fugaz mirada atrás, al origen de un arrabal donde muchos gitanos se sienten extranjeros en su casa. Abel y sus imágenes lo dejan entrever, pero su buena película hubiera ganado mucho si, además de entreverlas, nos hubiera dejado verlas en su antigua rudeza, que es la del fascismo, que aún golpea a estos días de cante y de queja que Abel busca y encuentra en el hondo abismo urbano del Polígono Sur sevillano.
Babelia
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