El 'indie' resucita el vinilo
Los sellos independientes optan por publicar en este formato casi olvidado
La industria dictaminó la desaparición del vinilo en 1983 con la llegada del CD, pero ha resultado ser que el muerto está más vivo que nunca. Hace un par de años que las grandes discográficas han vuelto a abrazar el vinilo tras ver el éxito de ventas de algunas bandas alternativas como Arctic Monkeys o Kaiser Chiefs, que a finales de 2006 empezaron a sacar ediciones limitadas a modo de objetos de culto. En Cataluña, las bandas y los sellos independientes no quieren ser menos. Algunos hasta optan por editar solo en vinilo. Tal como suena.
Es el caso de la banda de pop barcelonesa Le Pianc, con su nuevo disco, Zigzag (Bcore, 2010). "¡Es que ninguno de nosotros compra CD!", razona el guitarrista, Sergi Puyol, que asegura que hace 12 años empezó a comprar vinilos porque la música de jazz y soul que escuchaba entonces le era "más fácil de encontrar".
"El público catalán es muy esnob y le encanta enseñar que tiene vinilos en casa"
El mundo de la retromodernidad, que se ha abrazado a la estética del giradiscos, parece no estar dispuesto a soltarlo jamás. "El vinilo nunca se ha dejado de consumir. Es verdad que de finales de los ochenta al 2001 hubo un parada, pero ahora vuelve para quedarse", reflexiona Puyol, que es también el responsable del sello independiente Maravillosos Ruidos, con el que ha editado, solo en vinilo, los discos de Le Pianc, Tarántula y Thelematicos.
Víctor Velasco, fundador de la discográfica Sones, que ha editado lo nuevo de Le Pianc, afirma que el compacto tiene los días contados. "Es un formato fácilmente sustituible; en cambio, el vinilo no se puede copiar", dice. "Dentro de pocos años dejaremos de editar en CD". En la contraportada del vinilo hay un código para descargarse el disco y la portada, y poder construirse el plástico en casa o tenerlo en el ordenador. La misma opción que usa el sello Bcore en sus elepés, que desde hace tres años edita casi todos los lanzamientos de sus bandas en los dos formatos.
En discos Revolver, en la céntrica calle de Tallers, este año han inaugurado una sección de vinilos de bandas indie nacionales. "A nadie se le había ocurrido editar en este formato hasta ahora", explica Jordi Jover, encargado de compras de la tienda, señalando los nuevos lanzamientos de Nueva Vulcano, Delorean, Nacho Vegas, Mishima, Standstill, Margarita, Charades y The New Raemon. "El CD es un trozo de lata que se raya y la gente se ha dado cuenta de que es un timo", opina. Dice que hace cinco años era prácticamente todo lo que vendían y que ahora están entre el 40% y el 60%. "También ha ayudado el hecho de que el público catalán es muy esnob y le encanta enseñar que tiene una colección de vinilos en casa", añade.
En la vecina CD Drome tienen dos secciones de nacional en vinilo, una de indie y otra de electrónica. "El 80% de los discos de bandas nacionales independientes que vendemos en la tienda nos los traen directamente sus componentes, que o bien se autoeditan, que es el futuro, o vienen porque las discográficas no hacen bien su trabajo. Y prefiero que traigan vinilo", asegura Albert Salinas, encargado de la tienda. "Ahora vendemos la mitad en cada formato, pero estoy convencido de que el CD morirá y que las pocas persianas abiertas que quedan son gracias al auge del vinilo", afirma. Larga vida al vinilo.
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