Inéditas de Pérez Siquier en La Chanca
Carlos Pérez Siquier, Premio Nacional de Fotografía en 2003, ha reunido bajo una sola muestra su obra más representativa sobre el emblemático barrio almeriense de La Chanca, un total de 78 fotografías entre las que se encuentran algunas nunca antes expuestas en España.
La Chanca, todo un barrio, que se podrá visitar hasta el próximo 13 de marzo en el Museo Arqueológico de Almería, ofrece por primera vez una visión completa de la obra realizada por el fotógrafo entre 1956 y 1965 en este barrio levantado en torno a la Alcazaba y, por aquel entonces, sumido en la miseria.
Según Pérez Siquier (Almería, 1930), se trata de un trabajo que busca el "equilibrio entre el realismo social de aquella época y la mirada poética del autor" sobre un barrio que se encontraba "abandonado y en un estado de miseria". El fotógrafo rechazó cualquier atisbo de sensacionalismo y trató de reflejar "la autenticidad, la sinceridad y la dignidad de aquella gente, que vivía en unas condiciones especiales de carencia", pero que llevaba ropas limpias, aunque remendadas.
Otro punto de interés para el autor fue la particular arquitectura de La Chanca. "Un cubismo de mucho interés para los fotógrafos y los pintores", asegura el artista. La muestra, organizada por el Instituto de Estudios Almerienses (IES), organismo dependiente de la Diputación de Almería, recupera fotografías que hasta ahora se encontraban dispersas en catálogos o libros, o que estaban inéditas en España.
La exposición se estructura en dos grandes series ordenadas de forma cronológica: el primer bloque consta de 47 fotografías en blanco y negro, realizadas entre 1956 y 1962, y el segundo, en color, cuenta con una treintena de instantáneas captadas hasta 1965. Por primera vez se exponen en España ocho fotografías que forman la serie El entierro, cuyos negativos se perdieron en París, ciudad que Pérez Siquier escogió para exponerlas y escapar así de la censura franquista de la época.
El resto del bloque en blanco y negro se centra en la arquitectura, la vida de la gente en el barrio y en los retratos y miradas. Dentro del color, hay una primera serie de 16 instantáneas que siguen formalmente el blanco y negro, dentro del "humanismo". A continuación, las últimas fotografías, que el autor califica de "matéricas" y que, en sus palabras, "están cerca de la pintura contemporánea". Estas últimas obras, casi un ejercicio de abstracción, reproducen las paredes desconchadas de las viviendas de La Chanca e ilustran el trabajo de uno de los introductores de la fotografía de vanguardia en España.
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