Encalla la negociación por el suelo que ocupaban las vías en Málaga

La reunión entre el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, el presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Antonio González Marín, y la consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, no sirvió ayer para dar un solo paso adelante en la negociación sobre el destino de los suelos liberados por el soterramiento de las vías del tren. Como suele ocurrir siempre que encalla una negociación, del encuentro salió el compromiso de constituir una comisión técnica que defina posibles alternativas que pudieran satisfacer las aspiraciones de Adif y del Consistorio.

No va a ser una tarea nada fácil la que tengan los seis miembros del grupo -dos representantes de cada parte- porque las posiciones de partida están diametralmente enfrentadas. Adif exige compensaciones al Consistorio por cederle el suelo liberado, unos 63.000 metros cuadrados, a lo que el Ayuntamiento se cierra en banda. El Consistorio sostiene que ni Adif tiene derecho a ellas con la ley en la mano -porque el suelo seguirá considerado de dominio público- y que ya obtuvo importantes beneficios con el plan Renfe, la reordenación urbanística de la estación y su entorno.

Una comisión técnica estudiará alternativas para desatascar el litigio

La decepción por el resultado del encuentro fue proporcional a las grandes expectativas que generó. "El tema no ha sido desbloqueado", certificó el alcalde, Francisco de la Torre, con una mezcla de tristeza y mal humor. La ciudad espera desde hace años la eliminación de la cicatriz de las vías, que hacía de barrera entre los barrios de la zona oeste, y sobre cuyos suelos el Ayuntamiento proyecta un gran bulevar que además de permitir un nuevo acceso desde la ronda oeste al centro y esponjar las comunicaciones transversales, propicie más espacio libre a los barrios con más densidad de población de la ciudad. Las vías ya están enterradas, pero el horizonte de su reconversión es incierto, aunque el presidente de Adif vaticinó pese a todo, que "el acuerdo se va a producir".

González Marín matizó que la empresa dependiente del Ministerio de Fomento nunca ha pedido un solo euro, pero reivindicó el derecho que tiene a unos aprovechamientos urbanísticos que dijo se emplearían en obras ferroviarias. Adif quiere a cambio del pasillo ferroviario, suelo con derechos edificatorios, algo que, según el alcalde, "no se ha pedido en ninguna ciudad de España donde se han soterrado vías".

De la Torre insiste en que Adif no puede pedir nada porque Ayuntamiento y Junta pusieron 40 millones de euros para las obras de soterramiento, y ya obtuvo aprovechamientos de 128.000 metros cuadrados, utilizados para el centro comercial Vialia, un hotel y un edificio de viviendas junto a la estación.

La consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, que aportará la mitad de lo que cueste el bulevar, descartó que pueda acometerse obra alguna hasta que no haya acuerdo sobre el suelo, como quiere De la Torre.