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NECROLÓGICAS

Ana Mérida, bailarina y coreógrafa

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La bailarina y coreógrafa mexicana Ana Mérida, considerada como una de las forjadoras de la danza moderna de su país y que el lunes pasado murió, a los 69 años, fue inhumada el martes pasado en un cementerio de la capital mexicana. Mérida, que también trabajó para el cine, falleció por complicaciones de gastritis y úlcera, después de haber sido intervenida quirúrgicamente en dos ocasiones.Formada en el North Texas State College, de Dallas (Estados Unidos), Mérida emprendió en México su aprendizaje de danza, música y escenografía, hacia 1939. Tres años después estudió con Ana Sokolow y formó parte de su conjunto de danza moderna, llamado la Paloma Azul.

De 1947 a 1948 fue codirectora, y de 1948 a 1949, directora de la entonces recién fundada Academia de la Danza Mexicana. Fue también profesora en la Escuela de Arte Teatral y directora del Ballet Mexicano, con el que realizó giras por diversos países de Centro y Suramérica. Asimismo, dirigió el departamento de danza del Instituto Nacional de Bellas Artes de México. También fue coreógrafa de la Compañía Nacional de Danza y autora y productora de Ausencia de flores, ballet en homenaje al muralista mexicano José Clemente Orozco.

Recibió premios por su actuación en la película El Santo Oficio, en 1973, y por el montaje de las coreografías en La Luna y el venado y La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca, en 1986.

Ana Mérida era hija del pintor guatemalteco Carlos Mérida, que falleció hace cinco años en México.

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