Kobe Bryant se gana enemigos con la camiseta

La influyente comunidad armenia de Estados Unidos le ha declarado la guerra a Kobe Bryant. El escolta del equipo Los Ángeles Lakers y gran estrella de la NBA ha firmado un acuerdo publicitario de dos años con la aerolínea Turkish Airlines. Los armenio-americanos han enfurecido, porque consideran que Bryant y los Lakers le están dando apoyo a un país y a un Gobierno que sigue rechazando ciegamente que la matanza de 1,5 millones de armenios entre 1915 y 1919 supusiera un genocidio. Turquía defiende que aquellas muertes fueron el resultado de los últimos y convulsos años del imperio Otomano, en los albores de la Primera Guerra Mundial.

Probablemente, Bryant, nacido en Filadelfia en 1978, no supiera de esa disputa. Y si sabía de ella, probablemente no auguró que la comunidad armenia seguiría con aquellas heridas abiertas. El caso es que su decisión de ser "embajador global" de la principal aerolínea turca fue igual a esparcir sal sobre las heridas.

Los lakers pagan 22 millones al jugador, que nunca ha estado en turquía

En el sur de California hay una nutrida y poderosa comunidad de origen armenio, que alcanza las 700.000 personas y que ha comenzado un boicot que asegura que no parará hasta que Bryant se deshaga de su patrocinador o reconozca en un comunicado que hubo genocidio.

"Turquía es un país rico y de bellezas naturales y miles de años de historia cultural y artística", dijo Bryant en un comunicado al anunciar su acuerdo. "Los armenio-americanos esperamos que Kobe compensara lo que claramente parece ser un negocio rentable con una firme declaración contra la violación de los derechos humanos efectuada por Turquía, incluida, por supuesto, su continua negación del genocidio armenio", dijo la agrupación Armenian Youth Federation en otra declaración oficial.

En la polémica se han inmiscuido también las hermanas Kardashian, miembros de la jet set norteamericana y también de origen armenio.

Kim Kardashian ha pedido a sus 5, 5 millones de seguidores en la red social Twitter que llamen por teléfono a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, para que fuerce una votación de urgencia, antes del receso de Navidad, sobre una ley que reconocería la matanza de armenios como un genocidio, algo que EE UU se ha resistido a hacer porque Turquía es su aliado en la OTAN. La hermana de Kim, Khloe, está casada con el baloncestista Lamar Odom, que juega en el mismo equipo que Kobe Bryant. No es que Bryant necesite el dinero. Su salario estimado según la revista financiera Forbes es de 30 millones de dólares (unos 22 millones de euros). Tampoco es probable que tenga unos lazos emocionales muy grandes con el Bósforo. Nunca ha estado en Turquía. "Pero todos los compañeros del equipo que han ido me han dicho que es uno de los sitios más guay para visitar", dijo en la cadena CNBC.