EE UU celebra la semana de Madonna

"Dios mío, ¡estoy tan nerviosa!". ¿Qué puede poner nerviosa a Madonna, una cantante que ha hecho rendirse a audiencias enteras en medio mundo, que ha estado a punto de ser detenida en Toronto por fingir una masturbación en el escenario, que se ha crucificado en un concierto en la misma ciudad de Roma y que ha llegado a pasearse desnuda por las calles de Miami? La respuesta es la Super Bowl. "Tengo 12 minutos para montar el show más grande del mundo", dijo en una entrevista con el presentador Anderson Cooper. "Tengo ocho minutos para montar el escenario y siete para desmontarlo".

Esta es la semana de Madonna en EE UU. Lejos queda aquella época, hace casi una década, en que se convirtió en una proscrita en su país, por criticar abiertamente a George W. Bush y a la guerra de Irak en un cruento vídeo, grabado para la canción American life, un pastiche de repulsa al estilo de vida americano. Ahora Madonna es tan americana como la que más. Y ¿qué hay más americano que el intermedio de la Super Bowl, donde cantará el domingo, uno de los espacios más preciados para los artistas de EE UU? "La Super Bowl es como lo más sagrado de todo lo sagrado en América, ¿verdad?", dijo Madonna.

"tengo 12 minutos para montar el 'show' más grande del mundo", avanza

Toda esta parafernalia sirve para acompañar su nuevo single, Give me all your luvin, que se pondrá a la venta aquí en EE UU mañana. Ese mismo día, Madonna copará otro de los templos de la cultura pop americana: American Idol. Allí estrenará el nuevo vídeo, en el que aparece junto a dos estrellas: Nicki Minaj y M.I. A., que han colaborado con ella en la canción. Como ha hecho en discos recientes, Madonna, que hasta hace 10 años abría el paso, se hace guiar ahora por otros cantantes jóvenes. No es que en su nuevo disco, MDNA, que se publicará el 26 de marzo, Madonna dé muestras de volver a la imagen de serenidad y madurez que quiso ofrecer a mediados de los años noventa, cuando publicó un disco de baladas, protagonizó Evita y desarrolló un gusto por los vestidos de Valentino y Versace. Asume una imagen de chica de instituto -cantando con una voz que parece digna de su primer disco, en el que parecía que hubiera ingerido helio- rodeada en el vídeo de Give me all your luvin de animadoras con pompones. Quien diría que en verano cumplió los 53. La llamada "ambición rubia", que tuvo su primer éxito en 1983 con el sencillo Holiday, se ha quejado en reiteradas ocasiones por lo que califica de discriminación por edad. En un vídeo comercial para la cadena Macy's, para la que diseña una línea de ropa y complementos, y en el que aparece con su hija Lourdes, de 15 años, le dice a ésta: "Creo que discriminas por la edad y por las apariencias". En 2008, al cumplir medio siglo, había dicho: "Esta sociedad aqueja no solo discriminación por raza o sexo, sino también por edad".

Madonna ganó el 15 de enero un Globo de Oro por la canción Masterpiece, compuesta para la película que ha dirigido, W. E., sobre el romance entre Eduardo VIII y Wallis Simpson. Ese tema estará también en su disco. En aquellos premios agravió a Elton John, que competía contra ella. A modo de venganza, el lunes, en una entrevista en Good Morning America, John dijo que él nunca actuaría en la Super Bowl, pero que le deseaba buena suerte a Madonna en "su playback". Buena dosis de ironía británica para la cantante que ha vuelto a ser americana.