"No sigo las audiencias. Me limito a actuar"

A Óscar Jaenada (Barcelona, 1975) no le dado miedo inmiscuirse en grandes proyectos como Camarón, película con la que obtuvo el Goya en 2005, o participar en series de televisión como Javier busca su sitio. "Soy un intérprete polivalente", dice el actor, que participa tanto en proyectos cinematográficos independientes como en superproducciones de Hollywood (forma parte del reparto de Piratas del Caribe: en mareas misteriosas, con Johnny Depp y Penélope Cruz). Los espectadores lo pueden ver en Telecinco en el papel de Álvaro Mondego, protagonista de Piratas (lunes, 22.00) junto a Pilar Rubio (Operación Triunfo). "Es un personaje muy descarado, un miembro de la nobleza venido a menos" describe Jaenada. Esta ficción, que cuenta con 600.000 euros por episodio, reunió en su estreno, el 9 de mayo, a 3,5 millones de telespectadores (17,2% de cuota). Ajeno al vaivén de las audiencias, está satisfecho de su trabajo en Piratas.

Pregunta. De El Español en Piratas del Caribe a Álvaro Mondego en Piratas. ¿Se parecen ambos personajes?

Respuesta. No, son antagónicos. En la película soy un asesino de piratas y en la serie, ni siquiera soy un pirata, por lo menos al principio. Álvaro Mondego es un personaje más cómico y burlesco.

P. ¿Qué le atrae de su papel?

R. Lo que más me gusta de mi personaje es que siempre sale adelante con chulería y picardía, algo tan español...

P. Los lunes, hasta la llegada de Piratas, Telecinco emitía CSI. ¿Se siente responsable de haber echado de la parrilla a la mítica serie de forenses?

R. Ni siquiera me lo había planteado, supongo que habrá gente afectada por su retirada. Para nosotros es una oportunidad.

P. El primer episodio logró muy buena audiencia pero el segundo perdió un millón y Piratas no se ha recuperado. ¿Cómo le afectan estos resultados?

R. La verdad es que no sigo las audiencias. Estoy contento con el trabajo que hemos hecho todos. Lo del público es una cosa fuera de mi alcance, me limito a actuar.

P. Algunos críticos han sido duros con usted y con su compañera de reparto Pilar Rubio.

R. He trabajado con mucha gente que tenía menos experiencia. Ella tiene dos películas a su espalda. Hay que darle tiempo, no puedes pedirle peras al olmo. Pido paciencia. Soy del criterio de que me mejor que hablen de uno, aunque sea mal. Lo que no pueden pretender los críticos es compararnos con series como Los Soprano, porque sería absurdo.