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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Hanan Porat, caudillo del Gran Israel

Fundó más de 100 colonias en los territorios ocupados

Enric González

Hanan Porat (1943-2011) fue un héroe. También fue una demostración viviente de que ciertos héroes pueden causar serios daños a la humanidad.

Nació y recibió el nombre de Hanan Spitzer (años más tarde eligió el apellido Porat, que en hebreo significa "viña con fruto") en Kfar Pines, una colonia cercana a Haifa fundada por inmigrantes judíos del este de Europa. Cuando tenía un año, su familia se trasladó a Kfar Etzion, muy cerca de Jerusalén, que sería durante la guerra de 1948 escenario de una infame matanza de judíos por parte de la Legión Árabe jordana y de guerrilleros palestinos. La escabechina ocurrió poco después de que las fuerzas israelíes cometieran otra similar en la aldea árabe de Deir Yassin.

Era tan religioso como nacionalista, y siempre enemigo de los árabes

El pequeño Hanan sobrevivió porque, junto a otros niños de Kfar Tzion, fue evacuado a Jerusalén. También sus padres, organizadores de convoyes de abastecimiento, sobrevivieron, porque no se encontraban en el asentamiento cuando fue cercado por los árabes. La matanza y el hecho de que tras la guerra Kfar Tzion quedara en manos de Jordania influyeron de forma decisiva en Hanan Porat, que estudió en una yeshiva (escuela religiosa) y se graduó como rabino. Era tan religioso como nacionalista y enemigo de los árabes, hacia los que casi hasta su muerte profesó un odio profundo.

No hay que imaginarse a Porat como un rabino vestido de negro y con la barba enmarañada. Su aspecto juvenil era el de una estrella del rock de la época, con pelliza y bufanda de colores. Rebosaba carisma y simpatía. Cuando estalló la Guerra de los Seis Días, en 1968, se alistó en los paracaidistas y formó parte de las tropas de élite que conquistaron el Muro de las Lamentaciones en Jerusalén. Cinco años más tarde, en la guerra de 1973, resultó gravemente herido mientras combatía en el canal de Suez.

Para entonces ya se había hecho un nombre como líder del movimiento que preconizaba la colonización judía de todo el territorio conquistado al oeste del Jordán, lo que hoy se llama Cisjordania, y de todo el Sinaí, incluyendo Gaza. Para él no existía duda de que el Gran Israel formado tras la guerra de 1968 era una herencia de Dios, y consideraba pecador al judío que obstaculizara la colonización.

Fue uno de los creadores de Gush Emunim (Bloque de los Creyentes), una organización que fundó más de 100 colonias judías en los territorios ocupados. Y fue uno de los fundadores de la colonia judía en el centro de Hebrón, que en la actualidad sigue siendo una de las más violentas y extremistas.

Desde 1981 se dedicó a la política y, con breves interrupciones, formó parte de la Knesset (Parlamento) hasta 1999, siempre alineado con el ultranacionalismo y opuesto a cualquier tipo de acuerdo con los palestinos. En 1994, cuando el médico israelo-estadounidense Baruch Goldstein mató a tiros a 29 musulmanes palestinos en la mezquita de los Patriarcas de Hebrón, Porat elogió al criminal, aunque luego dijera que se le había malinterpretado.

El año pasado, ya enfermo de cáncer, declaró que no creía necesario expulsar a los palestinos de su propio territorio y que podían quedarse en Cisjordania (que él llamaba Judea y Samaria, como lo hace Benjamín Netanyahu), siempre que se sometieran a la autoridad israelí.

Tras su muerte, ocurrida el lunes, Netanyahu afirmó que Porat constituía "un ejemplo para los israelíes" por su "contribución a la construcción de Israel" y a la "formación de las nuevas generaciones".

Porat, a hombros de sus seguidores, celebra el permiso para construir una colonia en Samaria en 1975.
Porat, a hombros de sus seguidores, celebra el permiso para construir una colonia en Samaria en 1975.GETTY

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