La Iglesia pide a empresarios dinero para el escenario del Papa
La misiva lleva el membrete del Arzobispado de Santiago, firma del ecónomo diocesano, Dictino Maceira, fecha del pasado 20 de octubre y un número de cuenta de Caixanova. La han empezado a recibir establecimientos hosteleros de Santiago y su comarca y también grandes empresas gallegas. La Iglesia explica los grandes gastos que tendrá que afrontar durante la visita del Papa, el próximo 6 de noviembre, y ha decidido recurrir a los empresarios. Argumenta que ejercer como anfitrión de Benedicto XVI ocasiona "en el aspecto material cuantiosos gastos para las arcas diocesanas".
No pide una cantidad concreta sino que cada firma o pyme aporte lo que considere conveniente. Se trata de afrontar un gasto extra que solo será "soportable mediante la generosidad de quienes pueden y quieren prestar su colaboración y aportación económicas". Como reclamo, el ecónomo de la archidiócesis apela a que las aportaciones "tendrán la consideración de donativo a la Iglesia Católica, siéndole de aplicación los beneficios fiscales al mecenazgo".
Una portavoz del Arzobispado de Santiago argumentó ayer que se trata de buscar nuevos ingresos para pagar "todo lo que tiene que ver con la liturgia", sobre todo, el gigantesco escenario que ya se ha empezado a instalar en la Praza do Obradoiro donde el pontífice oficiará la ceremonia ante miles de personas. En el reparto de los gastos de la visita papal, el Gobierno central asumirá los costes de la seguridad y la Xunta financia una ambiciosa retransmisión de la televisión autónomica que facilitará la señal a canales de todo el mundo para que la sigan "150 millones de personas".
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