Aumentan la ejecución y el dinero en caja

Touriño no quiere irse de la Xunta sin dejar claro a los futuros inquilinos que la caja no está vacía. El informe de control presupuestario que hizo público ayer avanza que los 351 millones de euros apuntados ahora en la tesorería son un 29% mayores que los que halló tras el gobierno de Manuel Fraga. El grado de compromiso de las inversiones programadas en el primer trimestre es similar al de 2008 y su ejecución, también. Con ello el presidente en funciones quiere "romper el tópico" de que en año electoral se tira la casa por la ventana. Algo similar mencionó sobre los compromisos futuros. El 10% del gasto que el PP heredará hasta el año 2010 está cuatro puntos por debajo de lo que legó la Xunta de Manuel Fraga al bipartito, lo que para Touriño significa "menos compromisos y más dinero en caja". Todo ello, concluyó, "sin citar la crisis económica".

En cuanto a la deuda, los expertos creen que los niveles que maneja la Xunta de Galicia no son, ni mucho menos, preocupantes. "Cuando recurrir al crédito resulta fundamental por la insuficiencia de los ingresos fiscales y las transferencias del Estado, los entes autonómicos ponen en marcha todos los mecanismos a su alcance", señala Roberto Fernández Llera, experto en financiación autonómica y profesor del departamento de Economía de la Universidad de Oviedo. Santiago Lago, profesor de Economía Aplicada en la Universidad de Vigo, considera que gracias a un crecimiento de la economía gallega significativo durante los últimos años la Xunta pudo mantener el nivel de inversiones y mejorar su posición relativa.

Lo que pasará a partir de ahora es otra cosa: "Lo más probable es que la crisis dispare el déficit público, y que la relación entre deuda y PIB se eleve hasta del 10%".