La alcaldesa de Dénia declara en el juzgado por prevaricación

Por enésima ocasión, las controversias políticas de Dénia volvieron a dirimirse ante la justicia. La alcaldesa, la popular Ana Kringe, declaró ayer por espacio de 15 minutos en el juzgado número 1 imputada por un presunto delito de prevariación después de que el PSPV la denunciara por haberle impedido desde septiembre de 2008 el acceso a decenas de expedientes urbanísticos, contratos a empresas, documentos contables y facturas. Esto es, prácticamente desde que los populares accedieran al poder a través de una moción de censura que contó con el apoyo de un tránsfuga ex socialista y de otros tres grupos independientes.

En su declaración, Kringe optó por negar la mayor y aseguró que con su acusación el PSPV únicamente "pretende paralizar y poner piedras a la gestión municipal", al argüir que los socialistas podían haber accedido a cualquier documento municipal en un plazo de cinco días "por silencio administrativo" del Ayuntamiento. La alcaldesa, que se negó a contestar a las preguntas del abogado de la acusación particular que representaba a los socialistas, añadió: "Estoy muy tranquila ya que no he cometido ningún delito".