Valencia lleva siete años al límite de su endeudamiento

La alcaldesa Rita Barberá arremetió ayer contra el Gobierno porque, de prosperar el anuncio de la vicepresidenta económica Elena Salgado, Valencia no podrá solicitar nuevos créditos en 2011 porque su deuda supera con creces el 75% de su gasto corriente.

Valencia vive por encima de sus posibilidades desde hace años, denuncia la oposición. De hecho, el gobierno local que preside Barberá roza desde 2003 el tope de endeudamiento, establecido por ley en el 110% de los ingresos corrientes. La adquisición de miles de farolas, la reforma del Mercado de Colón, las mejoras en la ciudad durante la Copa del América o el parque de Cabecera, así como todos los sobrecostes han convertido a Valencia en la segunda ciudad más española con más deuda, después de Madrid. La deuda ha aumentado un 165% en 15 años, pero el vuelco se dio a partir de los comicios de 2003.

Obligada por la crisis, Barberá ha metido la tijera en el presupuesto de este año. "Nuestro endeudamiento ahora", dijo Barberá, "es del 109,9%. No hemos llegado al límite legal. Por eso, estoy dentro de la ley y no debo ser tratada de forma peyorativa por el Gobierno", reivindicó tras presumir de unas cuentas municipales saneadas, con tasas de ahorro neto y remanentes de tesorería positivos.

La oposición hace un análisis bien distinto. Los socialistas Carmen Alborch y Juan Ferrer culpan de las apreturas económicas a que el gobierno local presupuesta mal, por debajo del coste real de los servicios, un desfase que han salvado mientras fluía el crédito comercial.

Para aliviar las arcas municipales, el PSPV exige a Barberá que reclame a la Generalitat los más de 30 millones que le debe por servicios delegados y que dote de dinero el recién creado fondo de cooperación local.Mientras Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, clama contra el Gobierno central porque no podrá endeudarse en 2011, Emilio Martínez, concejal de Hacienda de Elche, la tercera ciudad de la Comunidad Valenciana, celebra el alza de un 9% de las transferencias del Estado que prevé el anteproyecto de presupuestos del Estado. "Nos encontramos con cuatro millones de euros que no teníamos previstos", comenta.

- Elche (230.000 habitantes). La deuda municipal era de 161 millones de euros a finales de 2009, un ejercicio en que las arcas municipales tuvieron unos ingresos corrientes de 156 millones, según datos de las liquidaciones parciales de los presupuestos que ofrece el Ministerio de Hacienda. "Estamos en la misma situación que en mayo pasado, ya sabemos que no podemos endeudarnos y hemos elaborado un plan de saneamiento a tres años", comenta Martínez. Y añade: "No creo que ningún ayuntamiento tenga interés en endeudarse el año que viene aunque su deuda sea inferior al 75% de sus ingresos corrientes".

- Alicante (334.000 habitantes) afronta una situación saneada. La deuda municipal (152 millones de euros) apenas representa el 57% de los ingresos corrientes de 2009 (240 millones de euros).

- Torrevieja (101.700 habitantes) La situación es otra. Los ingresos corrientes fueron de 82 millones de euros en 2009 mientras que la deuda acumulaba se disparó hasta 69.165 millones de euros con un crecimiento de 16.473 millones en un solo ejercicio.

- Gandia (80.020 habitantes) también tendrá que apretarse el cinturón. La deuda municipal de 95 millones desborda con creces los 80 millones de ingresos corrientes que obtuvo en 2009.

- Torrent (78.543 habitantes) es otra de las localidades que supera los límites para endeudarse. Arrastra una deuda municipal de 43 millones de euros y sus ingresos corrientes ascendieron a 51 millones de euros en 2009.

- Benidorm (71.000 habitantes) acumula una deuda de 93 millones de euros y obtuvo unos ingresos corrientes de 96,5 millones en 2009. Tampoco podrá recurrir al endeudamiento en 2011. El anterior gobierno del PP firmó en julio de 2009 siete préstamos en otras tantas entidades bancarias por importe de 27 millones de euros para obtener liquidez, pagar a los proveedores y someterse a continuación a un plan de saneamiento a seis años.

- Alcoi (61.500 habitantes) arrastra una deuda de 39,9 millones de euros y sus ingresos corrientes alcanzaron 41 millones de euros en 2009. El gasto corriente del Ayuntamiento de Alcoi ha aumentado en un 56% desde 2000, año en que el PP ocupó la alcaldía. En la última década los ingresos han crecido un 34% y la deuda municipal un 53%.

- Dénia (44.600 habitantes). A pesar del descenso en los ingresos urbanísticos, mantiene una deuda (28,6 millones de euros) inferior al 75% de sus ingresos corrientes (44,7 millones). En 2010, el Ayuntamiento de Dénia redujo su presupuesto en 5 millones de euros con respecto a 2009 y lo situó a los niveles de 2006. El ejecutivo local expresa su malestar por haber tenido que devolver a las arcas del Estado 720.000 euros por adelantos a cuenta.

- Castellón (180.000 habitantes) podrá endeudarse por los pelos. Su deuda era de 103 millones de euros en 2009 y sus ingresos corrientes ascendieron a 140 millones en 2009. Sin embargo, Juan José Pérez Macián, concejal de Hacienda, evitó precisar las intenciones del Ayuntamiento a la espera de que se fijen definitivamente los criterios para calcular el margen de las corporaciones locales.

- Burriana (34.565 habitantes) no podrá recurrir al endeudamiento en 2011. La deuda municipal superaba los 22,3 millones de euros mientras que los ingresos corrientes en 2009 fueron de 26 millones.

- La Vall d'Uixó (32.900 habitantes) supera por poco los límites. Arrastraba una deuda de 23,8 millones de euros y tuvo unos ingresos corrientes de 30 millones. Fuentes municipales achacan a la herencia de la anterior legislatura socialista la imposibilidad de reducir la deuda.

Varios responsables de haciendas locales recuerdan que las propuestas del Gobierno deben plasmarse en unos presupuestos que todavía no están aprobados.

Información elaborada con las aportaciones de Artur Balaguer, Lucía Gadea, María Fabra y Arturo Ruiz