Claudia Sheinbaum, presidenta del ‘trend’: la política mexicana se vuelve viral entre los adolescentes
La mandataria ha pasado a convertirse en una tendencia con memes, canciones y disfraces


Una adolescente baila con una banda presidencial y una coleta alta al ritmo de reggaeton. Es Claudia Sheinbaum. O, al menos, su versión de TikTok. En el video se escucha la voz de la presidenta de México, enunciando una de sus promesas de campaña: “Vamos a construir más preparatorias que queden cerca de la casa”. Lo que empezó como una broma entre amigas terminó como un fenómeno que se replicó en miles de pantallas y ha desencadenado en imitaciones, memes, canciones y disfraces. Claudia Sheinbaum Pardo, la científica seria, la política disciplinada y heredera del obradorismo, es ahora trending topic. Está de moda, no solo en el sentido tradicional de una presidenta con alta aprobación —78%, según la última encuesta de Enkroll para EL PAÍS y W Radio—, sino en el sentido más literal y contemporáneo: se volvió viral.
Como muchas otras cosas, todo empezó por un TikTok que se salió de control. El video original nació en Guadalajara, cuando Silvana Pardo, una estudiante de preparatoria de 17 años, se caracterizó como Sheinbaum para una actividad de su escuela. Se puso un traje blanco, la banda presidencial y su representativa coleta. Acompañada de un par de amigas disfrazadas de Miguel Hidalgo, se grabó bailando. “Lo subí pensando que lo iban a ver mi papá y mi abuela”, recuerda Silvana. El video ahora acumula más de 33 millones de reproducciones y cuatro millones de likes.
“Por mi apellido siempre me han dicho que la presidenta es mi tía”, bromea. “Pero no, no somos familia”. Ahora, cuando va por la calle, la reconocen y le piden fotos. “Me muero de la risa, pero me encanta. Siempre he sido la niña que participa en debates y que habla de política. Entonces, estoy soñada. Viviendo mi mejor momento”, comparte Silvana.
@chupiritas0 @silvanaa por la quinta transformación !!!!!@Claudia Sheinbaum Pardo #mexico🇲🇽 #fyp #vivamexico
♬ sonido original - chupiritas
La viralización coincidió con los días previos a Halloween y Día de Muertos, cuando los jóvenes se disfrazan, y el algoritmo hizo el resto. El baile se bautizó como el trend del bienestar, en alusión a los programas sociales impulsados por Morena. “Subí el video sin pensarlo mucho”, dice Silvana. “Admiro que la presidenta haya tomado el video de una forma tan positiva. Otro político podría haberse ofendido, pero ella lo vio por lo que era: un gesto de admiración”.
La presidenta no solo se enteró, sino que también lo celebró. En su mensaje por el primer año de Gobierno, en el Zócalo capitalino, hizo referencia al video y, días después, lo proyectó durante una de sus conferencias matutinas. “Me recibieron unos 20 niños y niñas en Puebla, todos cantando: ‘Vamos a hacer más preparatorias que queden cerca de la casa’. Y ese es el objetivo”, dijo sonriente. El pasado marzo, Sheinbaum anunció una inversión de 1.250 millones de pesos para la construcción de 18 centros educativos de bachillerato a nivel nacional. Silvana pudo conocerla poco después en un evento de la mandataria en Jalisco sin planearlo, asegura. “Me reconoció y me dijo: ‘Ay, eres la del video’. Es superbuena onda”, cuenta Silvana.
En los últimos años, distintos políticos han intentado hablar el idioma de las redes. El exministro Arturo Zaldívar se declaró swiftie por su amor a Taylor Swift, el excanciller Marcelo Ebrard presumía su gusto por el K-pop y fue apodado tío Marcelo, mientras el PRI apostó por llenar sus redes de shitposting: contenido irónico o absurdo para parecer menos acartonado. Pero el resultado suele ser desigual. “Si lo hace mi amigo, me da risa. Si lo hace el PRI, da cringe —vergüenza ajena—”, resume Alexis Yáñez, comunicólogo de 25 años. “Los jóvenes no solo interpretamos el meme, sino también de quién viene”, asegura.
La clave del fenómeno Sheinbaum, según los expertos, está en que nació de manera orgánica. Andrea Samaniego, analista del discurso político, explica: “En redes sociales fingir simpatía se nota y se castiga. En cambio, un gesto espontáneo, aunque sea un baile o una parodia, puede tener más impacto que una campaña millonaria”. Para ella, este fenómeno representa “lo opuesto al marketing. Y lo genuino siempre gana”.
Samaniego recuerda que la percepción sobre Sheinbaum no siempre fue así. “Durante la campaña, su comunicación con los jóvenes no era buena. Le decían que era gris, que no tenía carisma. De ser percibida como una científica rígida y poco expresiva, ha pasado a convertirse en un personaje memeable”. Jorge Pérez Gómez, profesor de Comunicación en la FES Acatlán de la UNAM, analiza la estética presidencial: “Su imagen es reconocible y admirada entre los jóvenes por su sobriedad. El peinado, la vestimenta, su forma de hablar. Creo que la población está cansada del estereotipo del político hombre, macho, de corbata. Ella actúa más como una profesora, que lo fue muchos años”, señala.
Su condición de primera mujer presidenta también suma. “Representa la posibilidad de liderazgo femenino en un país históricamente dominado por hombres”, apunta Pérez. Para muchas chicas, eso es un motivo de inspiración. “Más allá del partido político, es admirable que haya llegado a la presidencia siendo mujer”, dice Itzela Cruz, estudiante de preparatoria. “No sigo mucho las mañaneras, pero me inspira”, comparte Talia, de 15 años. Por otro lado, los jóvenes consultados para este reportaje se han mostrado más distantes. “No apoyo a ningún partido, pero ella no me cae mal”, apunta Yañez. Junto a José María, de 15 años, consideran que los llamados impuestos saludables, le restaron puntos de popularidad, especialmente por el gravamen de 8% a los videojuegos violentos: “Solo lo está haciendo para tener más dinero y no va a acabar con la violencia. Fuera de eso, no sé si ha cumplido sus promesas”, señala.
Más allá del entretenimiento, el fenómeno tiene implicaciones electorales. Los jóvenes mexicanos de entre 18 y 29 años representan casi un tercio del padrón electoral. Que Sheinbaum haya conseguido volverse referencia entre adolescentes es, para Pérez Gómez, “un éxito comunicativo”.
La mandataria, además, mantiene un nivel de credibilidad alto para los estándares latinoamericanos, apunta Samaniego. “A diferencia de otros líderes que intentan replicar estas dinámicas, ella combina autenticidad y coherencia en su gestión”, explica. “Lo más difícil en comunicación política es la credibilidad. Partidos como el PRI o el PAN han perdido posicionamiento, por eso sus intentos de conectar mediante memes no funcionan. En cambio, Sheinbaum conserva legitimidad y disciplina”.

A un año de su mandato, la presidenta ha enfrentado tensiones diplomáticas y desafíos económicos, sin verse envuelta en escándalos de corrupción o enriquecimiento, destaca Samaniego. “Esa reputación le otorga una base sólida para convertirse en figura de identificación”, asegura. Aun así, advierte de que la popularidad no le asegura inmunidad. “Los jóvenes le están dando un voto de confianza. Pero si falla sus expectativas, se lo quitarán rápidamente. Esta generación castiga la incongruencia más que ninguna otra”, señala.
Por ahora, el trend del bienestar sigue vivo. En TikTok, el audio de “más preparatorias cerca de la casa” sigue replicándose entre bailes y disfraces. “Es efímero”, aseguran los expertos. Mientras se agota, la presidenta ya logró colarse en el feed de la generación que vive a través de las pantallas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma











































