La banca digital: la solución que ahorra tiempo a un país anclado al efectivo

En México se forman colas interminables en los cajeros de los bancos, el 78% de las transacciones se hacen en efectivo y solo 2 de cada 10 personas tienen tarjeta de crédito. Un país en el que la banca digital se propone como una solución para que la inclusión financiera cada vez abarque a un número mayor de personas. Las ventajas de la digitalización de la economía en Latinoamérica han sido el tema a tratar este jueves en la primera Cumbre de Desarrollo Económico Digital, organizada por EL PAÍS y Mercado Pago en Ciudad de México.

La banca digital ha obtenido su popularidad gracias a poner el foco en el tiempo que las personas no tienen. Jorge Zebadúa, director de productos bancarios de BBVA, ha rememorado la explosión de este recurso que las entidades ponen a disposición de los usuarios de servicios financieros. Un método que ya usan más de 30 millones de mexicanos. “Ya no hay que ir a la sucursal, ni perder una hora en la fila, lo tienes en la palma de tu mano”, ha ejemplificado.

El gran reto es democratizar el acceso a los productos financieros. “La montaña a escalar”, la confianza de los usuarios a mover su dinero en un ambiente digital, ha explicado Pedro Rivas, director general de Mercado Pago. Rivas ha enfatizado que las empresas que otorgan productos digitales tienen la responsabilidad de “dar seguridad” tanto a los consumidores como a las pequeñas y medianas empresas, los grupos más alejados de los créditos o inversiones.

El siguiente panel, dedicado a cómo la innovación digital impulsa la inclusión financiera, ha abordado los retos para conseguir que menos personas se queden fuera del progreso. Y para comenzar, Ricardo Martínez, director de desarrollo de negocios para Uber en México, ha retrocedido a los inicios de la empresa de movilidad en el país. “En Uber no existía el pago en efectivo, cuando lanzamos en México lo hicimos, hay que escuchar al cliente” ha expuesto. Ahora, el objetivo “es ofrecer a los usuarios nuevas alternativas de pago seguras”.

La inclusión pasa por facilitar desde abajo. Ramiro Nandez, director de grandes alianzas de Mercado Pago, ha explicado como una empresa que usan más de 45 millones de mexicanos revolucionó la forma de recibir las remesas. “La persona para cobrar una remesa tiene que desplazarse más de 30 minutos, con un costo de 150 pesos”. Ahora se pueden cobrar a través de la pantalla en cuestión de minutos. Gracias a la digitalización, las soluciones aparecen inmediatamente para solventar problemas del día a día.

La tarjeta de crédito, un producto financiero que lleva 60 años en el mercado, pero que apenas usan un 20% de los mexicanos, ha sido el tercer tema de debate. José Maceda, director de créditos de Mercado Pago, ha explicado como solo durante el Buen Fin, uno de los periodos de más actividad comercial de México, la empresa expidió más de 60.000 tarjetas. “Este producto tiene un papel fundamental en la inclusión financiera, que hace que el usuario se vea motivado a llevarse el dinero a una cuenta”, ha explicado Maceda.

El futuro es aún más accesible. El director de créditos asume que a finales del próximo año se produzca el siguiente avance: “¿Cuándo se dejarán de usar las tarjetas físicas? En diciembre de 2024 veremos una mayor adopción de productos contactless”.

La primera Cumbre de Desarrollo Económico Digital ha unido a México, Colombia y Chile en tres conferencias celebradas entre el 4 y el 6 de diciembre, para demostrar que la innovación tecnológica en las finanzas debe pasar por la inclusión de toda la sociedad latinoamericana.

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