Belinda, acosada por un fan sobre el escenario
La cantante mexicana fue agredida durante un concierto en Guanajuato por un hombre que atravesó su cerco de seguridad

Ni el escenario, frente a miles de ojos, es un lugar libre de acoso. La cantante Belinda fue tocada sin su consentimiento por un hombre que interrumpió su actuación durante la Feria de las Fresas en Guanajuato y burló el cerco de seguridad. El fan se subió a la tarima y abrazó fuertemente por la cadera a la artista, al grito de: “Belinda, te amo”.
Mientras Belinda forcejeaba con el acosador y trataba de soltarse de sus brazos, el hombre aprovechó para colocar la mano debajo de su falda y después apoyó la cabeza en su pecho. La cantante mantuvo la calma pese a la tensión del momento y aseguró al acosador que si la soltaba, no le iba a pasar nada. “Si respiras y te relajas, te juro que no te van a amarrar”, le dijo al hombre.
Minutos después el fanático es bajado del escenario y devuelto a la multitud. Belinda pide a su equipo que le den al hombre algo que parece una botella de agua. “Quédate ahí, te tomas esto y respiras porque casi te da algo. Me asustaste”, le dice al hombre. “Está pedito, no pasa nada”, agrega después la cantante. Entre gritos y aplausos de sus seguidores y con la cara claramente tensa, Belinda respira profundamente tras lo sucedido y como buena artista, continúa el show.
Después del altercado, ha compartido en sus redes sociales un mensaje sobre la agresión. “En el concierto de hoy se subió una persona al escenario, casi me tira y me lastimó. Además del susto que me llevé, me duele mucho la espalda”, y cierra el texto con un par de emojis de rostros tristes.
Llama la atención cómo algunos medios de la prensa mexicana y la latina en Estados Unidos han abordado lo sucedido. “Belinda fue víctima de la euforia de un fan”, dice Telemundo. “Permitió que un fan la abrazara, pero el cariño del joven provocó que la cantante terminara lastimada”, como si la responsable de la agresión recibida fuera ella y no el atacante. Como si lo sucedido fuera algo anecdótico y no una muestra más de la violencia que viven las mujeres en México. Incluso arriba de un escenario.
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