López Obrador nomina a Graciela Márquez, exsecretaria de Economía, para la presidencia del Inegi

El presidente Andrés Manuel López Obrador ha confirmado la mañana de este miércoles que ha nominado a Graciela Márquez, exsecretaria de Economía, para ocupar la presidencia del Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi), en sustitución del actual titular, Julio Santaella, cuyo mandato culmina a finales de mes. El nombramiento no ha estado exento de polémica, dado que Santaella mantiene tensas relaciones con López Obrador y ha pedido al mandatario que defina su decisión sobre el relevo. “Ya está, es Graciela Márquez”, ha zanjado esta mañana el presidente al ser preguntado sobre la sucesión al frente del instituto de estadísticas.

Santaella, que ocupa el cargo desde 2016 y aspiraba a repetir mandato, había afirmado el martes que la indecisión del presidente generaba incertidumbre en el INEGI. “En la medida que haya más información podemos comenzar a hacer planes”, aseguró el funcionario tras presentar una encuesta sobre percepción de bienestar entre la población. Tras conocer la decisión del presidente, Santaella ha felicitado a través de Twitter a Márquez. “El día de hoy se ha hecho público y oficial que Graciela Márquez ocupará la titularidad del Inegi a partir del 2022. Felicito sinceramente a Graciela, la primera presidenta del Instituto, a quien además le extiendo todo mi apoyo y mi deseo de éxito en esta encomienda”.

Márquez reaccionó también por la misma red social al nombramiento del presidente y en una cadena de mensajes dijo que “ser la primera mujer en la presidencia del INEGI me anima para seguir construyendo una sociedad más igualitaria e incluyente”. Sobre las expectativas que genera su nombramiento, ha explicado que “de la mano del capital humano que conforma el INEGI, encabezaré los trabajos para continuar con la tarea de entregar a la sociedad y al Estado información valiosa generada con los más altos estándares”. Márquez (Ciudad de México, 1963) es economista por la UNAM, cuenta con una maestría en la misma ciencia por el Colegio de México y con un doctorado en Historia Económica por la Universidad de Harvard. Fue secretaria de Economía y se integró a la Junta de Gobierno del INEGI en enero.

Una de las principales críticas que se han hecho a la nominación de Márquez es la cercanía con el presidente López Obrador, lo que podría afectar la autonomía del INEGI, cuyas investigaciones sobre avance económico, lucha contra la pobreza y desigualdad han sido cuestionadas más de una vez por el presidente. De hecho, Santaella dejó entrever el martes durante su conferencia de prensa que las decisiones del presidente hacen que las instituciones en México “están sujetas a incertidumbre”. Sobre el temor de un alineamiento extremo con el Ejecutivo, Márquez —cuyo nombramiento debe ser aún ratificado por el Senado— ha respondido que “la sólida estructura institucional y su autonomía son esenciales para que el Instituto continúe siendo un referente indispensable para el análisis de la realidad mexicana”.