El incendio en la plataforma de Pemex en el golfo de México impacta en la producción y las ventas de la petrolera

El incendio de una plataforma en el complejo Ku-Maloob-Zaap en el golfo de México le costará a la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) cientos de millones de dólares, según estiman especialistas, y pone el foco en la calidad de sus empresas contratistas. El peritaje sobre la causa del accidente determinará sobre quién recae la culpa, lo cual pudiera incrementar los costos para Pemex.

Un incendio en una plataforma de gas y crudo E-Ku-A2 de Pemex el domingo dejó cinco personas fallecidas, seis heridos y al menos dos desaparecidos, de acuerdo con el reporte más reciente. Solo en ventas, Pemex perderá 240 millones de dólares por los ocho días en que permanecerán cerrados los 125 pozos que fueron afectados por el incendio en la plataforma, de acuerdo con un análisis de Ramsés Pech, especialista y consultor independiente del sector energético nacional. A esto habrá que sumar lo que le costará a la empresa condicionar la reapertura de cada pozo cerrado, lo cual pudiera ser entre 40 y 50 millones de dólares.

La agencia calificadora de riesgo Fitch actualizó sus perspectivas para la empresa a partir del incidente, ya que el complejo aporta el 40% de la producción total. Fitch espera que el incidente acelere la caída en el flujo de caja de la empresa hasta promediar negativo 12.000 millones de pesos al año durante los próximos tres años. Desde enero de 2019, Pemex ha aumentado su producción de crudo en nuevos campos, agregó Fitch, pero no compensa la pérdida a partir del accidente.

“Aunque la compañía ha aumentado con éxito la producción en nuevos campos durante los últimos dos años, una disminución más rápida en la producción del campo maduro de Ku-Maloob-Zaap sería más difícil de compensar”, advirtió Fitch en su reporte.

El incendio se dio cuando Cotemar, empresa contratada por Pemex, daba mantenimiento a la plataforma, lo que pone en el foco la calidad tanto de las empresas contratistas como los contratos mismos, explica Pech. “Es necesario hacer una revisión de cada uno de los contratos, si todas las compañías que están trabajando para Pemex cumplen con los seguros y con los estándares que se necesitan en esta industria, porque no es juego de niños”, opina Pech, y sentencia: “En esta industria de hidrocarburos no puede haber austeridad”. El sindicato al que están afiliados la mayoría de los empleados de la petrolera estatal, el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), responsabilizó a Pemex, diciendo que el incendio se dio por “una mala gestión”.

Pech enfatiza que la investigación y el peritaje que le corresponde a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), así como a las empresas aseguradoras de Pemex y Cotemar, serán clave para estimar los costos de reparar o reemplazar la infraestructura. Según Pemex, el presupuesto asignado a mantenimiento es de 5.000 millones de pesos, lo cual equivale al 1% de su presupuesto total. “La infraestructura de Pemex ya tiene más de 30 años y esta está en zona de Campeche en donde la salinidad del agua de mar es corrosiva, la pregunta es ¿cuánto están invirtiendo cada año en el mantenimiento preventivo y cuánto en mantenimiento correctivo?”, cuestiona Pech.

En 2017, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) recomendó a Pemex y a la Secretaría de Energía buscar un socio privado en un acuerdo llamado farmout para exploración y producción de Ku-Maloob-Zaap. Esto, dijo el regulador, pudiera aliviar la alta carga fiscal de Pemex y permitir reinvertir más de sus ganancias. La petrolera no siguió la recomendación y los farmouts que se acordaron durante la Administración anterior fueron congelados por el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

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