Lo que no se puede perder de la FIL

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La Feria del Libro de Guadalajara (FIL) arranca este sábado con América Latina como invitada de honor. Tan genérica como amplia, la propuesta garantiza durante los próximos ochos días la presencia de un buen ramillete de figuras reconocidas junto a jóvenes creadores que marcan tendencia.

Escritores como Mario Vargas Llosa, Norman Manea, Leonardo Padura, Gioconda Belli, María Negroni, Nélida Piñón o Andrew Wylie dialogarán en mesas y presentaciones de libros con jóvenes creadores con la identidad del continente y la fuerza del español sometida a reflexión.

Entre los homenajeados de esta edición estarán el escritor y periodista Héctor Aguilar Camín, quien recibirá el reconocimiento de la profesión con el Homenaje de Periodismo Cultural Fernando Benítez o Enrique Krauze que presenta nuevo libro y recibirá el Homenaje al Mérito Editorial. Otro de los recordados será Ignacio Padilla, un escritor entrañable al que se echará de menos este año. Tras su fallecimiento en accidente automovilístico, la FIL ha tenido el gran detalle de recordar a una de las sonrisas habituales en la Feria.

A la pata latinoamericana no le puede faltar Brasil. La FIL es el único festival literario fuera de este país que apuesta por cerrar la brecha entre el portugués y el español. En esta edición, la FIL redobla su apuesta tras los últimos cambios políticos en el país sudamericano. Entre otros autores estarán presentes Adriana Lunardi, Afonso Borges, Luiz Ruffato o Ana Paula Maia gracias a la sección Destinação Brasil, que mezclará de autores noveles y consagrados.

Centroamérica se hará presente con el ciclo Nosotros los otros, y autores como Sergio Ramírez, Mario Martz (ambos de Nicaragua), María Eugenia Ramos (Honduras) y Dante Liano (Guatemala) se encargarán de exponer las diferentes formas del contar esta pequeña y convulsa región del continente.

Los últimos acontecimientos políticos se harán sentir como es habitual en Guadalajara. El ensayista estadounidense John Irving es una de las voces que se alzarán contra Trump. En su último ensayo publicado en EL PAÍS escribía “en pocos días estaré en México con el deseo de tener algo esperanzador que decir”.

Y de los veteranos a los más jóvenes gracias a Ochenteros. 20 escritores nacidos en los años ochenta, que experimentan y se atreven. Hijos del neoliberalismo para quienes la violencia y el narco ya no son personajes, sino parte de su contexto de vida. Provenientes de trece países: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua, Perú, Uruguay y Venezuela, este grupo representa un amplio abanico de propuestas estéticas. Cuando la FIL comenzó, hace 30 años, la gran mayoría no habían nacido.

En la FIL la fiesta es casi tan importante como los libros. Además de las que organizan las editoriales este año, La Yegros pondrá la nota musical de calidad. Con raíces afectivas y sonoras del litoral argentino, materializa una extraña y explosiva mezcla que va del chamamé dub a la copla funky y de la cumbia rap a las rolas más bailables. Ritmos frenéticos y el acordeón se mezclan con electrónica para caracterizar el nuevo sonido de la cumbia: un ritmo nacido en Colombia pero ahora infiltrado en toda Latinoamérica y Europa.