El cantante ‘macho’ de México pide perdón a “todas las mujeres”
Gerardo Ortiz se disculpa por un vídeo en el que quemaba a una mujer infiel y mataba a su amante
Pedir perdón no es algo que le guste a un tipo como Gerardo Ortiz. Ni si quiera cuando truena a su alrededor. El popular cantante de corridos, sin quitarse el sombrero ni responder a preguntas, dedicó apenas cinco minutos esta semana a disculparse públicamente por su incendiario vídeo Fuiste mía. La filmación, que ha catalizado una contundente reacción antimachista en México, muestra una historia de infidelidad (con mucha lencería) en la que el músico acaba metiendo a su pareja en el maletero y quemándola viva, no sin antes descerrajarle un tiro en la frente a su amante. Un final muy del gusto de la narcocultura pero que en un país donde cada tres horas una mujer muere asesinada ha colmado el vaso de la paciencia.
El escandaloso vídeo, tras su lanzamiento a principios de este año, acabó en los tribunales, y a principios de julio la fiscalía ordenó la detención de Ortiz, de 26 años, por apología de la violencia de género. El domingo pasado, cuando el cantante había aterrizado en Culiacán (Sinaloa) y se disponía a recoger su maleta, fue capturado por la policía federal y tuvo que pagar una fianza de 50.000 pesos (2.600 dólares). Ahora está pendiente de juicio.
Con estos antecedentes, Ortiz y su cara de niño con barba se dirigieron este jueves a la población femenina. “Quiero ofrecer disculpas a todas las mujeres, que fueron ofendidas por este vídeo y a todas las organizaciones que defienden los derechos de las mujeres”, dijo. Luego, sin profundizar demasiado, anunció que había tomado la decisión de retirar el vídeo de las redes sociales bajo el argumento de “que eso está ocasionando más chismes”. La alocución, sin preguntas, no duró ni cinco minutos.
Sus palabras fueron acogidas con frialdad por las organizaciones feministas. Aunque la retirada del vídeo era una de sus exigencias, el tiempo que tardó Ortiz y la constatación de que sólo lo hizo después de ser detenido, le sustrajeron cualquier aplauso. También hubo quien consideró desenfocado el debate. “Me parece absurdo que con toda la violencia que hay en este país, hayan detenido a un cantante. El Estado tiene mal ajustadas sus prioridades para erradicar la violencia contra las mujeres”, señaló la directora ejecutiva del Grupo de Iinformación en Reproducción Elegida (GIRE), Regina Tames.
El arresto de Ortiz se inscribe en el creciente rechazo que suscitan los narcocorridos. Tras 10 años de guerra contra el crimen organizado, 100.000 muertos y 25.000 desapariciones, en México se advierte la extenuación hacia el culto a la violencia. El resultado es que esta flor de arrabal, aunque sus loas al crimen y sus letras de pelo en pecho sean difíciles de evitar en emisoras locales, taxis y comercios, se enfrenta cada día a más obstáculos. Ciudades tan norteñas como Chihuahua y el mismo Estado de Sinaloa, de donde es natural El Chapo, los han proscrito. Como los héroes de su canciones, empiezan a quedar fuera de la ley.
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