Un hombre es linchado en México durante unas fiestas patronales

El sábado por la noche, durante las fiestas patronales de un pueblo del Estado de Hidalgo, un hombre fue golpeado durante horas por una turba vecinal hasta que murió. El nuevo caso de linchamiento ocurrió en Tlaxcoapan, un municipio de unos 12.000 habitantes y ubicado a una hora y media de la capital mexicana, donde la desaparición de una menor provocó que los pobladores acusaran a un hombre y una mujer de ser los culpables y emprendieran justicia por su propia mano.

La tarde del sábado una familia se presentó en la comandancia de la policía municipal para denunciar que su hija había sido raptada por una pareja de secuestradores. Las autoridades comenzaron la búsqueda de la niña y detuvieron a un joven que portaba marihuana como sospechoso. Una pareja que se presentó a la instancia policial para conocer la situación legal del detenido fue interceptada por unos 350 pobladores que se encontraban a las afueras de las instalaciones.

Según la versión de la Fiscalía estatal, al escuchar que la pareja conocía al detenido, alertaron a sus vecinos, que estaban en los festejos patronales y la mayoría bajo los influjos del alcohol, para que los apoyaran a retenerlos. A gritos y empujones, se llevaron a las dos personas hasta la plazuela de la localidad, donde los comenzaron a golpear para que se declararan culpables.

La Secretaría de Seguridad Pública del Estado montó un operativo para intentar rescatar a la pareja que era linchada en el kiosco de la plaza. Los policías dispersaron a los pobladores con gas lacrimógeno y lograron sacar de la turba vecinal a la joven que estaba amarrada de manos y pies, pero su acompañante ya había muerto. También fueron golpeados cinco agentes, uno de ellos resultó con heridas de gravedad y otros tres con daños severos. Las autoridades informaron que no hay pruebas para asegurar que las dos personas atacadas sean parte de una banda de secuestradores, como lo aseguraron los vecinos.

El domingo los pobladores de Tlaxcoapan marcharon por las calles del pueblo para exigir seguridad. En pancartas denunciaron que en el municipio han ocurrido diversos hechos violentos, como la muerte de una joven, sin que las autoridades castiguen a los responsables. “Queremos paz”, se leía en uno de los escritos que portaba un vecino y que fue reportado por la prensa local.

El mes pasado un asaltante fue linchado en un camión de pasajeros. El relato policial indica que tres delincuentes abordaron un autobús que circulaba entre la Ciudad de México y el vecino Estado de Puebla e intentaron asaltar a los viajeros, pero varios de ellos se defendieron. En el forcejeo, uno de los asaltantes disparó una pistola y al rebotar la bala mató a uno de sus cómplices. Los pasajeros aprovecharon para someter al ladrón y golpearlo hasta matarlo. El tercer asaltante también fue apaleado, pero logró ser rescatado por la policía.

En México el linchamiento es un fenómeno frecuente asociado a la falta de eficacia judicial y a la poca confianza que tiene la sociedad en las instituciones. Un estudio de académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) indica que tan sólo en 2015 se registraron 62 casos. El Estado de México, Oaxaca y Puebla son las entidades donde se han presentado el mayor número de incidencias.

La impunidad es uno de los diez principales problemas que aqueja a la sociedad mexicana. Datos recabados por la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) destacan que el 46% de la población detenida se encuentra aún sin sentencia y menos del 1% de los delitos son castigados. "Del total de delitos consumados, solamente existe un 4.46% de sentencias condenatorias. Lo cual nos arroja una impunidad cercana al 95% de los delitos que fueron acreditados por la autoridad como consumados", se detalla en el Índice Global de Impunidad 2016.