FOTO: Joser Fischnaller. (Sony Classical International)
Cantante lírico y director de orquesta
Quizá uno de los rostros españoles más conocidos en todo el mundo, Plácido Domingo, muestra un compromiso inquebrantable con su país de origen. "Yo mismo voy por todas partes como si fuera un embajador", dice una voz grave pero luminosa al otro lado del hilo telefónico. El tenor habla desde Nueva York. Recién aterrizado de Viena. En todos sus conciertos, en cualquier rincón del planeta, canta una zarzuela para dejar constancia de sus orígenes. "Pero en esto de la marca España estamos atrasadísimos. ¿Cómo es posible que en un restaurante estadounidense sea tan complicado encontrar un buen vino de Rioja o un ribera del Duero? No hay un mercado bien hecho. Ninguno de nuestros productos está bien promocionado".