El centenario inolvidable de Agustín Penón
Le has dado otra dimensión a mi concepción del universo lorquiano. Nos dejaste una investigación fundamental llena de un amor profundo
Querido Agustín, la pandemia nos ha dejado sin tu centenario. Miedo, olvido y fantasía (editorial Comares), el magnífico libro de Marta Osorio sobre tus investigaciones en la Granada culpable y aterrada de 1955, cambió mi universo lorquiano. Lo trastocó por completo y me enamoré de ti. Me enamoré de tu pasión, de tu generosidad, de tu perseverancia, de tu entrega pese al miedo y de ese afán desinteresado por descubrir el oscuro secreto por el que le sigue sangrando la herida al duende....
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Querido Agustín, la pandemia nos ha dejado sin tu centenario. Miedo, olvido y fantasía (editorial Comares), el magnífico libro de Marta Osorio sobre tus investigaciones en la Granada culpable y aterrada de 1955, cambió mi universo lorquiano. Lo trastocó por completo y me enamoré de ti. Me enamoré de tu pasión, de tu generosidad, de tu perseverancia, de tu entrega pese al miedo y de ese afán desinteresado por descubrir el oscuro secreto por el que le sigue sangrando la herida al duende. Ese secreto que nos sacude y que nos duele a los dos en el mismo lugar.
Dejaste escrito: “… me pregunto si hay una manera eficaz de llegar al fondo de este asesinato. Creo que no la hay. El secreto de esta muerte se irá a la tumba con los pocos que lo conocen. Permanece enterrado ya bajo una enorme montaña de culpabilidad y de miedo. Un miedo que lo contagia todo, también yo lo siento ahora avanzar sigilosamente dentro de mí…”. Sin embargo, y pese al miedo, nos dejaste una investigación fundamental llena de un amor profundo.
Seguro que no has olvidado a Emilia Llanos, la gran amiga de Federico. Sólo accedió a hablar contigo y te ayudó hasta el final. Cuando te instalaste en Nueva York, Emilia y tú mantuvisteis una correspondencia fundamental que publicó después la editorial Comares en El enigma de una muerte. Te marchaste a Nueva York con tu famosa maleta para escribir la mejor biografía de Lorca. Es muy revelador lo que le confesaste a Jorge Guillén: “¿Así que está escribiendo un libro sobre Federico?”. “Escribiré ese libro sólo si puedo probar todos los datos y escribir un libro que el propio Federico aprobase”.
Antes de morir se la enviaste a William Layton. Gibson llegó a Granada una década después y supo de la existencia de la maleta. Se puso en contacto con Layton y acordaron que el hispanista se hiciera cargo de ella y escribiera tu libro. Una década después Plaza & Janés editó Diario de una búsqueda lorquiana. Libro que no convenció a Layton. Le propuso a la escritora Marta Osorio que se hiciera cargo de la maleta y ahí comenzó la aventura extraordinaria de Miedo, olvido y fantasía. Marta falleció en 2016 y la maleta pasó a sus sobrinos. Ella quería que estuviera en un centro cultural o museo de Granada. Después de cinco años, la maleta sigue en una notaría.
Te sentirás orgulloso de saber que Juan Carlos García de Polavieja e Isabel M. Reverte crearon Amigos de Penón y Marta Osorio. Ellos habían organizado un congreso internacional por tu centenario. La pandemia lo frustró. Yo me siento amiga y mucho más porque tú le has dado otra dimensión a mi concepción del universo lorquiano. Espero que este 2022, aunque con retraso, podamos celebrarte en ese congreso internacional.
Así que, querido Agustín, me niego a que seas un centenario olvidado. Prometo que —así que pasen otros 100 años— seguiremos sin olvidarte.