Valautín Albillo 2019, sugestivo y evocador

No estaban tan locos Paolo Armando y Victoria Serrano cuando crearon, hace 10 años, Ca’ di Mat (casa de locos, en dialecto piamontés) para su goce vitivinícola, aprovechando la hacienda agrícola familiar situada en la zona de San Martín de Valdeiglesias (Madrid). Un hermoso paraje donde conviven el viejo viñedo con los olivos y almendros. Una ubicación privilegiada para la elaboración de grandes vinos con poca intervención humana, que es lo que se estila hoy. Allí cuentan y gestionan 45 pequeñas parcelas con cepas de hasta 80 años, plantadas ...

No estaban tan locos Paolo Armando y Victoria Serrano cuando crearon, hace 10 años, Ca’ di Mat (casa de locos, en dialecto piamontés) para su goce vitivinícola, aprovechando la hacienda agrícola familiar situada en la zona de San Martín de Valdeiglesias (Madrid). Un hermoso paraje donde conviven el viejo viñedo con los olivos y almendros. Una ubicación privilegiada para la elaboración de grandes vinos con poca intervención humana, que es lo que se estila hoy. Allí cuentan y gestionan 45 pequeñas parcelas con cepas de hasta 80 años, plantadas sobre suelos graníticos en la zona madrileña de Gredos, a unos 850 metros de altura. Un tesoro que saben aprovechar Curro Bareño y Jesús Olivares, jóvenes enólogos con amplia experiencia.

Este logrado blanco de albillo es fruto del cuidado ecológico de las viñas, de una rigurosa selección de racimos y de la fermentación del mosto en barricas de roble francés, donde permanece un año. No necesitan más para que el vino muestre un panorama aromático sugestivo, evocador, donde la fragante fruta exótica y las notas cítricas dibujan un horizonte luminoso de especias, hierbas de monte y flores silvestres, todo sustentado por el terruño y la madera. Sabroso, glicérico, el leve gusto a miel en boca hace que el eco de los aromas resuene en el recuerdo.