Polémica por el examen de Matemáticas II de la Evau de Madrid: miles de alumnos piden que se impugne
Los estudiantes se quejan de su dificultad. Varios profesores consideran que es complicado que se repita porque no hay nada que no esté en los contenidos, y apuntan al enfoque erróneo en las clases de Bachillerato
No hay Evau sin un examen polémico. Y el de Matemáticas suele ser el más habitual. Empieza a ser una constante año tras año que, en la realización de las pruebas de acceso a la universidad, haya alguna prueba de la que el alumnado se queje por su dificultad. Este curso le ha tocado al de Matemáticas II, las que se imparten en el Bachillerato de Ciencias, en las comunidades autónomas de Madrid y La Rioja, donde centenares de estudiantes se han quejado a través de las redes sociales e incluso han abierto una petición en Change.org para impugnar la prueba, que acumula alrededor de 11.000 firmas en un día.
Una cosa es el mayor o menor grado de dificultad del examen, que en este caso ha sido relativamente elevado en algunos apartados, según el presidente de la Sociedad Madrileña de Profesores de Matemáticas, José Luis Muñoz, pero otra historia es conseguir que se repita. “No hay nada que no esté en los contenidos, no se sale de los parámetros, así que veo muy complicado que se impugne. El examen se ajusta a la normativa”, comenta Muñoz. La Comunidad de Madrid y La Rioja fueron las primeras comunidades en empezar la Evau, este lunes, mientras que el resto se unió a partir del martes —excepto Baleares, que las realiza la semana que viene—.
El distintivo principal de la prueba de Matemáticas II en la Evau madrileña, según Muñoz, ha sido que algunas de las preguntas impelían al alumnado a relacionar varios conocimientos. “Si las clases de Matemáticas durante el curso se convierten en una recopilación de exámenes de la Evau de años anteriores, cuando se plantean preguntas en las que hay que relacionar distintos conocimientos, los estudiantes se sorprenden y se pueden bloquear. A veces es una cuestión de falta de tiempo para impartir todo el temario, pero hay que replantear la manera de dar las clases”, argumenta.
Esta es la línea que se adoptará a partir del año que viene, cuando se implante el nuevo modelo de prueba de la Evau. Habrá más preguntas que obliguen a razonar y será más competencial, es decir, menos memorístico y más aplicado. Las faltas de ortografía bajarán hasta un 10% la nota de cada prueba y se dará la opción de elegir entre distintas preguntas en los ejercicios, pero siempre que no sea posible dejarse una parte del temario sin estudiar, como sí se podía hacer hasta ahora. En principio, este nuevo modelo iba a aplicarse este año, pero la convocatoria de elecciones generales adelantadas obligó a su aplazamiento.
La queja general de las decenas de estudiantes que han mostrado su descontento a través de las redes sociales y de los medios de comunicación ha sido doble. Por un lado, la dificultad de algunas de las preguntas y, por otro, la falta de tiempo para responderlas todas, tanto en la Comunidad de Madrid como en La Rioja. Así lo expresa Ainhoa, estudiante de 17 años que este miércoles hizo la prueba. “El bloque de probabilidad no tenía nada que ver con lo que nos habíamos preparado. Entiendo que haya preguntas de mayor reflexión, pero no daba tiempo a terminarlo en 90 minutos”, expresa la joven madrileña, que se lamenta al ver que su objetivo de entrar en Arquitectura en Madrid se complica, ya que la nota de corte del año pasado fue un 12,3. También ocurre con otras carreras de la rama de Ciencias, para las que computa esta asignatura. “Lo vendieron de asequible y era imposible. Yo me he dejado todas las preguntas a medias”, protestaba una estudiante riojana en la televisión pública de la comunidad autónoma.
Petición para impugnar
Para tratar de conseguir una segunda oportunidad y poder repetir el examen de Matemáticas II en la Comunidad de Madrid, se ha lanzado una campaña de recogida de firmas a través de Change.org para impugnarlo. En un día ha conseguido 10.800 apoyos, aunque la cifra sigue aumentando. Las probabilidades de que esta prospere, sin embargo, son escasas, ya que los contenidos se recogen en el currículo, según Muñoz.
La exigencia y la competitividad para acceder a algunos grados es muy elevada. En algunos casos, como Matemáticas y Física o Medicina, la nota de corte es superior al 13 sobre 14. Cada décima cuenta, pues, para poder cursar la carrera deseada. En este contexto, como la elección de carrera y facultad se realiza por distrito único nacional, es decir, todos los estudiantes que se presentan en España compiten entre ellos, con independencia de cuál sea su autonomía, para conseguir las plazas, surgen comparaciones entre los exámenes de distintas comunidades y protestas por la disparidad de dificultad.
Para el Partido Popular y Vox, la diferencia de exámenes en la Evau supone un agravio comparativo. Con la promesa de deshacer esta desigualdad, tanto los populares como los de extrema derecha llevan años repicando la melodía de hacer un examen único e igual para todo el territorio nacional. El último movimiento en esta dirección se produjo este domingo, cuando el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, anunció que las 14 comunidades autónomas donde gobierna su partido habían alcanzado un acuerdo para elaborar una Evau “común, justa y homogénea”. Así lo incluyeron, también, en su programa electoral de las últimas generales ambas formaciones.
Los expertos consideran, sin embargo, que por muy sensata que suene la medida en la teoría, en la práctica es muy compleja de aplicar, debido al conflicto educativo y político que desencadenaría. En Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares, País Vasco y Galicia, además, se añade una asignatura extra, la de la lengua cooficial.
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