Apoyar a las minorías y la enseñanza

Mucho pop, mucho rock, poco jazz, razonable tajada de mundo clásico y muy poco flamenco. ¿Y quién les eligió a ellos y no a otros?, se preguntarán. La lista fue negociada, pactada, consensuada por varios. Los asesores culturales de Moncloa, por una parte; la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), por otra; la Asociación de Artistas Intérpretes y Ejecutantes (AAIE) y la Asociación Fonográfica y Videográfica Española (AFYVE), cuyos máximos representantes -Eduardo Bautista, de la SGAE, que llevó la voz cantante, al parecer; Luis Cobos de AAIE, y Antonio Guisasola, de AFYVE- estuvieron pre...

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Mucho pop, mucho rock, poco jazz, razonable tajada de mundo clásico y muy poco flamenco. ¿Y quién les eligió a ellos y no a otros?, se preguntarán. La lista fue negociada, pactada, consensuada por varios. Los asesores culturales de Moncloa, por una parte; la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), por otra; la Asociación de Artistas Intérpretes y Ejecutantes (AAIE) y la Asociación Fonográfica y Videográfica Española (AFYVE), cuyos máximos representantes -Eduardo Bautista, de la SGAE, que llevó la voz cantante, al parecer; Luis Cobos de AAIE, y Antonio Guisasola, de AFYVE- estuvieron presentes.

Los distintos temas a comentar tuvieron también su importancia en la lista de elegidos que se entrevistó ayer con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. La intención era que hubiera caras conocidas para llamar la atención sobre la piratería. Y es que son quienes más venden los que se enfrentan de manera más cruda a ese problema. Pero tampoco era cosa de cerrar el paso a lo más minoritario, con lo que se añadieron algunos nombres de intérpretes menos conocidos como Carmen París, Dead Capo, así como representantes de la música clásica y de la ópera, como la soprano Ana María Sánchez.

Todos y cada uno de ellos le regalaron a Zapatero un disco dedicado y el presidente demostró estar al tanto de lo suyo, aunque con algunas ideas preconcebidas. Por ejemplo, con respecto al flamenco. Al parecer, Zapatero se mostró optimista por el auge de este arte, cosa que Marina Heredia, la única representante de ese palo que estaba presente en la reunión, no pudo más que negarle.

Flamenco, folk y jazz

Aun así, el presidente se mostró especialmente sensible al asunto de las músicas alternativas y adelantó que en la ley que les prometió ayer a los músicos habrá un apartado especial para los campos más minoritarios, entre los que citó el flamenco, el folk y el jazz.

Con Josep Pons, director de la Orquesta Nacional de España, tuvo una complicidad especial. "Por cercanía", dijo, ya que su mujer, Sonsoles Espinosa, es profesora de música y canta en el coro de la Orquesta Sinfónica de Radiotelevisión Española. "Anunció también que se hará un esfuerzo especial por aumentar la educación musical en las escuelas", comentaba horas después de la reunión Fernando Neira, portavoz de la SGAE.

Pons se mostró muy satisfecho con el encuentro. "Llegar allí, a La Moncloa, ya es algo muy importante", afirmaba el director musical. "Creo que no se había hecho nunca, que los de la SGAE se lo habían propuesto a Aznar y no quiso".

A Pons le pareció especialmente importante la idea de apoyar a las músicas alternativas, algo que él hace también en sus programas con orquestas sinfónicas. "La reunión ha sido muy distendida y ha resultado muy divertida. Me gustó que subrayara que veía más a España como una potencia cultural y no armamentística", afirmó el músico.

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