Las empresas españolas reciben las medidas con alivio
Las empresas y los bancos españoles presentes en Argentina recibieron con alivio las medidas propuestas por el Gobierno de Eduardo Duhalde para salir de la crisis. Telefónica, el Santander Central Hispano (SCH), el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), y Repsol-YPF son las cuatro compañías con mayores intereses en este país.
La petrolera Repsol-YPF, explicó, en un comunicado a la CNMV, que 'las medidas anunciadas ayer, tales como la libre flotación del peso, la liberalización parcial del corralito y la eliminación del impuesto a los intereses junto a una política fiscal más rig...
Las empresas y los bancos españoles presentes en Argentina recibieron con alivio las medidas propuestas por el Gobierno de Eduardo Duhalde para salir de la crisis. Telefónica, el Santander Central Hispano (SCH), el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), y Repsol-YPF son las cuatro compañías con mayores intereses en este país.
La petrolera Repsol-YPF, explicó, en un comunicado a la CNMV, que 'las medidas anunciadas ayer, tales como la libre flotación del peso, la liberalización parcial del corralito y la eliminación del impuesto a los intereses junto a una política fiscal más rigurosa, representan una aproximación a las posiciones ortodoxas de los organismos internacionales, lo que sin duda redundará en beneficio de Argentina y de la propia compañía'.
En todo caso, dada la situación de incertidumbre actual respecto a las medidas que pueda adoptar el Gobierno argentino sobre el sector petrolero, Repsol afirma que no está en condiciones de evaluar el impacto de esas decisiones políticas sobre la cuenta de pérdidas y ganancias del año 2001.
El resto de las empresas con grandes inversiones en Argentina no quisieron realizar declaraciones oficiales, aunque fuentes cercanas a estas compañías coincidieron en señalar que las medidas tomadas por Duhalde 'son un paso hacia adelante en la buena dirección'.
Esta posición favorable no les permitió hablar de 'medidas positivas porque todavía es pronto'. A su juicio, antes de tener un juicio completo es necesario saber dos cosas: la posición del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la cuantía del bono con el que el Gobierno compensará parte de los daños que sufrirán los bancos tras el levantamiento parcial del corralito.
Respecto a este asunto, se barajan diferentes valoraciones. Según Caja Madrid, el bono en pesos que el Gobierno debería entregar a los bancos 'podría suponer hasta 20.000 millones de dólares'. Según otras fuentes, la cantidad está más cerca de los 18.000 millones de dólares.
Otra de las cuestiones que considen clave los inversores españoles es la reacción popular a las medidas mañana miércoles, cuando se abran las entidades. 'Hoy parece que Duhalde está más afianzado en el poder. Parece capaz de soportar las protestas y los organismos internacionales, como el Banco Mundial, también lo perciben así'.
A pesar del impacto que la pesificación de los créditos tenga en los balances bancarios, las entidades financieras creen que es una manera de evitar morosidad futura. En cualquier caso, creen que la medida de convertir a pesos la economía es una condición necesaria para que el país recupere la política monetaria y pueda afrontar con solvencia un régimen cambiario en el que el dólar fluctúe con libertad.