LA POLÉMICA DE LAS 'VACAS LOCAS'

La UE propone un etiquetado que detalle el origen exacto de la carne

Los ministros de Agricultura de la UE, reunidos en Luxemburgo, acordaron exigir un sistema obligatorio y estricto de etiquetado de la carne. Este sistema de etiquetado, que aún deberá ser aceptado por el Parlamento Europeo, permitirá al consumidor identificar el origen de la carne desde que nace el animal, su lugar de engorde, el de sacrificio y qué rutas de comercialización ha seguido hasta que llega al plato.

El sistema de etiquetado es la última medida planteada por las instituciones europeas en relación con la epidemia de las vacas locas, que se daba por cerrada desde el levantamien...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los ministros de Agricultura de la UE, reunidos en Luxemburgo, acordaron exigir un sistema obligatorio y estricto de etiquetado de la carne. Este sistema de etiquetado, que aún deberá ser aceptado por el Parlamento Europeo, permitirá al consumidor identificar el origen de la carne desde que nace el animal, su lugar de engorde, el de sacrificio y qué rutas de comercialización ha seguido hasta que llega al plato.

Más información

El sistema de etiquetado es la última medida planteada por las instituciones europeas en relación con la epidemia de las vacas locas, que se daba por cerrada desde el levantamiento, el año pasado, del embargo al vacuno británico. La presidencia portuguesa de la Unión ha logrado poner de acuerdo a todos los países miembros, incluidos Francia y Alemania, los dos que inicialmente se negaron a levantar el embargo al vacuno británico por considerar que no ofrecía aún suficientes garantías. Alemania reconsideró luego su postura, pero no así Francia.El sistema está previsto en dos fases. La primera se iniciaría el próximo septiembre y obligaría a los Estados miembros a poner en todos los productos cárnicos una etiqueta con unos códigos de identificación del animal y del país donde se le ha sacrificado, así como el número de licencia del matadero.

La segunda fase, prevista para enero de 2002, añade a lo anterior los datos sobre el país de nacimiento del animal y el lugar donde se crió.

Sin mercado

La carne de vacuno británica no tiene prácticamente mercado en la UE tras el levantamiento del embargo en agosto del año pasado. "Los datos no son fiables", como reconoce Bruselas, "porque las autoridades británicas se niegan a dar cifras sobre las exportaciones realizadas desde 1996". En la Comisión Europea afirman que apenas un centenar de toneladas ha circulado por la UE durante los ocho meses transcurridos desde el levantamiento del embargo.

Francia asegura que por sus carreteras no circulan camiones con carne de bovino procedente del Reino Unido hacia España desde agosto, por el exceso de celo que aplican por las dudas que tienen hacia el estado real de la epidemia vacuna. Precisamente Francia es el único Estado miembro de la UE que está aplicando el embargo al bovino británico, lo que representa una violación de la decisión de los Quince.

La EEB (encefalopatía espongiforme bovina) tuvo un desarrollo fulgurante en el Reino Unido. En 1987, el número de animales afectados por la enfermedad era de unos 400. Aumentó rápidamente hasta los 37.000 casos en 1992, y luego el número de nuevos casos comenzó a descender.

En septiembre de 1998, el total acumulado de casos se cifró en 175.239, que afectaron a 34.473 explotaciones (el 60% de los rebaños de vacas lecheras y el 15% de vacas nodrizas). A finales de febrero de este año los casos de EEB acumulados alcanzaron los 178.120 animales, pero la reducción en los nuevos casos ha sido considerable, de los 34.829 de 1993 a los 3.197 de 1998 y a los 2.232 del año pasado. En lo que va de año se han registrado 39 nuevos casos.

En los países que habían importado del Reino Unido animales o alimentos para el ganado, el número total de casos es de aproximadamente 967. Irlanda registró a finales de febrero 471 casos de EEB. Le sigue Portugal, con 380, y Francia, con 88. También tienen el problema, con cifras muy inferiores, Alemania, Bélgica, Dinamarca, Italia, Luxemburgo y Holanda. En estos países es difícil hablar de retroceso o de avance de la enfermedad por su baja incidencia. El caso portugués es el que preocupa más -aparte de Francia- por la evolución de la enfermedad.

En total se han contabilizado en la UE 179.087 casos, de los que sólo 967 se han dado fuera del Reino Unido. A nivel mundial están registrados 180.701 casos. A pesar de la reducción en el número de casos, la Comisión Europea considera que hay que ser prudente. "Los resultados provenientes de Portugal ponen de manifiesto que el incumplimiento de las medidas puede hacer que la epidemia progrese en otros lugares", según fuentes del Ejecutivo comunitario.

La conocida como crisis de las vacas locas surgió en el Reino Unido el 20 de marzo de 1996. Las autoridades británicas anunciaron entonces la muerte de 10 británicos por una nueva variante de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, vinculada con la encefalopatía espongiforme bovina (EEB). El anuncio provocó una crisis de confianza sin precedentes de los consumidores europeos respecto a la carne de vacuno británica y sus productos derivados. Las informaciones oficiales, en muchos casos parciales y contradictorias, contribuyeron a aumentar la inquietud.

Las variantes humanas

La enfermedad de Creutzfeld-Jakob (CJ) y su nueva variante son dolencias neurológicas mortales e incurables. La CJ clásica fue descrita por primera vez en los años veinte, no tiene relación con los alimentos de vacuno y se presenta en todo el mundo con una incidencia de un caso por cada millón de habitantes. Afecta casi siempre a personas mayores de 60 años. Los pacientes mueren en general en el plazo de cuatro a seis meses.En 1996 se identificaron 10 casos de una nueva variante de la CJ. Los pacientes aquejados eran todos adultos jóvenes de entre 19 y 41 años de edad. La evolución de la enfermedad es más larga, unos 13 meses, y las lesiones y los signos clínicos son diferentes. El 20 de marzo de 1996, el Gobierno británico dio como explicación más probable que los casos de la nueva variante estuvieran contagiados por las vacas con EEB.

Archivado En