Huida de la instantánea convencional

Empowered Images reúne 61 obras de nueve autores norteamericanos cuyo único denominador común es la práctica de una fotografía inventada huidiza de todo aquello que tenga algo que ver con la instantánea convencional. "Los artistas de esta exposición se han enamorado perdidamente de sus propias fantasías. Su comunicación con nosotros se realiza a través de su arte en un lenguaje que parece codificado", escribió al respecto Sandy Ballatore, conservadora del Museo de Bellas Artes de Nuevo México.Desde las escenificaciones y situaciones ficticias creadas por Eileen Colvin, que afirma tomar ...

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Empowered Images reúne 61 obras de nueve autores norteamericanos cuyo único denominador común es la práctica de una fotografía inventada huidiza de todo aquello que tenga algo que ver con la instantánea convencional. "Los artistas de esta exposición se han enamorado perdidamente de sus propias fantasías. Su comunicación con nosotros se realiza a través de su arte en un lenguaje que parece codificado", escribió al respecto Sandy Ballatore, conservadora del Museo de Bellas Artes de Nuevo México.Desde las escenificaciones y situaciones ficticias creadas por Eileen Colvin, que afirma tomar como referencia y fuente de inspiración "la pintura europea, el cine negro, la mitología y los acontecimientos que son noticia", a la fascinación que Darryl J. Curran siente por la realidad fotográfica frente a la realidad como ilusión.

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Este último fotógrafo norteamericano -que estará presente en la inauguración de la muestra y participará en una mesa redonda el próximo día 22- explica que su obra "es el resultado de dejarse llevar por lo fortuito, por la suerte", para lo que utiliza los objetos más diversos: desde tiras de prueba hasta restos de fotos, maquinaria y hardware abandonados".

Modelo en París

Ruth Mayerson Gilbert, antes de dedicarse a la fotografía, a los 63 años, fue profesora de arte en una escuela de barrio y posteriormente se ganó la vida como modelo en París. Su producción, sumamente hiperrealista, rebosa de referentes pictóricos y participa de la teoría de su autora de la no existencia de una estética específicamente fotográfica.

Por el contrario, Joyce Neimanas practica una fotografía sin cámara -no usa máquina fotográfica ni ampliadora-; como recurso construye sus imágenes a partir de materiales ya impresos, tales como ilustraciones de periódicos y revistas, a partir de los cuales fabrica sus collages y montajes de diversas características.

Lo autobiográfico ocupa un papel esencial en los argumentos utilizados por Linda Arele Goodine. Sus tomas las hace en ambientes construidos por ella misma, conformando un discurso visual repleto de evocaciones hacia lo catastrófico.

Patrick Nagatani y Andree Tracey son los autores más divertidos que integran el grupo. Sus fotos, que destilan humor negro e ironía, están realizadas con película instantánea Polaroid de gran formato (50 60 centímetros) y con elementos de la pintura, el teatro, las instalaciones... Posiblemente sean los trabajos emblemáticos del conjunto, al no distinguirse fácilmente dónde empieza y acaba lo inventado y lo real.

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