Una patrullera española apresa un pesquero italiano tras varios disparos de advertencia

La Armada española detuvo el sábado a tiros a un pesquero italiano en aguas de Baleares, según se supo ayer. Los pescadores afirman que uno de los disparos se efectuó en el interior del puente de mando, cuando ya había sido abordada la embarcación. Esta versión ha sido negada por las autoridades españolas, que reconocen que se dispararon tiros al aire para detener el barco pero que no se efectuó ningún disparo en su interior. El barco, el Orazzio II, moderno y de 21 metros de eslora, ha quedado retenido en Palma. El patrón deberá afrontar una fianza de cinco millones de pesetas.

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La Armada española detuvo el sábado a tiros a un pesquero italiano en aguas de Baleares, según se supo ayer. Los pescadores afirman que uno de los disparos se efectuó en el interior del puente de mando, cuando ya había sido abordada la embarcación. Esta versión ha sido negada por las autoridades españolas, que reconocen que se dispararon tiros al aire para detener el barco pero que no se efectuó ningún disparo en su interior. El barco, el Orazzio II, moderno y de 21 metros de eslora, ha quedado retenido en Palma. El patrón deberá afrontar una fianza de cinco millones de pesetas.

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Los pescadores italianos afirman que un oficial del patrullero Javier Quiroga, de la Armada española, disparó un tiro de pistola en el interior del puente de mando del pesquero italiano Orazzio II, de Reggio Calabria, mientras procedía al apresamiento de la embarcación porque se encontraba faenando ilegalmente con redes de deriva -para capturar pez espada y atún rojo- en aguas del este de Baleares, dentro del límite de las doce millas territoriales de España. "Fue horroroso. ¿Qué hacen los militares en un asunto civil, de la Unión Europea. ¿Si tuve miedo? Siempre tengo miedo", manifestó el patrón del pesquero, Francesco Arenas, de 40 años. "Es una guerra contra los pobres", añadió.Este periódico pudo comprobar que en el cristal de popa de la ventana de la cabina, a 1,50 metros de altura, hay un impacto de bala. Un portavoz de la dirección informativa (Drisde) del ministerio español de Defensa negó ayer tarde que se hubieran producido tiros en el interior del buque pero reconoció que desde la patrullera se efectuaron disparos al aire de carácter disuasorio para dar el alto al redero, que se negaba a obedecer las órdenes.

El incidente ocurrió el sábado a las 7 de la mañana, aunque se conoció ayer. Sucedió en alta mar, más allá del canal entre Menorca y Mallorca. El pesquero tenía una red calada. Llegó el patrullero, les intimidó con el sonido de tres tiros al aire. Uno de ellos lanzó un proyectil de bengala que cayó a veinte metros del Orazzio. El incidente surgió cuando el capitán del redero se negó a obedecer las órdenes del Javier Quiroga para que se dirigiera al puerto de Palma de Mallorca, reconocen los italianos.

Dos marineros y dos oficiales del buque de la Armada Española tuvieron que saltar desde una rápida embarcación neumática al pesquero. Los tripulantes, Vicenzo, Rocco, Marcelo, y Vicenzo, de entre 24 y 49 años de edad, quedaron retenidos a popa, vigilados por dos soldados armados, mientras discutían el capitán y los oficiales de la armada.

El patrón del Orazzio II, un moderno barco de 21 metros de eslora, que opera desde el puerto de Reggio Calabria, explicó ayer en el puerto de Palma: "Yo estaba en aguas internacionales, a 14,8 millas de la costa y sólo quería obedecer lo que me indicaran desde Roma, las autoridades de Italia ".

Los inspectores de pesca calculan que las varias artes de pesca de arrastre qué lleva a bordo suman una longitud de unos diez kilómetros. La Unión Europea autoriza un máximo de 2.500 metros. Las redes, conocidas como cortinas de la muerte, por su actuación indiscriminada sobre numerosas especies protegidas, se usan especialmente para pescar atún rojo que en primavera acude del Atlántico al Mediterráneo para desovar.

El ministro de Agricultura, Luis Atienza, declaró anoche en la localidad de Sa Pobla (Palma de Mallorca): "No conozco los detalles del apresamiento. Nadie discute que el apresamiento ha sido difícil por la actitud del barco de no colaborar. Será seguramente la Armada quien pueda explicar mejor las condiciones en que se produjo este apresamiento".

Ayer, los armadores almerienses cortaron el tráfico en la carretera nacional 340 y provocaron incidentes en el puerto andaluz, después de que un camión procedente de Nador (Marruecos), cargado con pescado marroquí con destino a Alemania, burlase el bloqueo con la ayuda de las fuerzas de seguridad.

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