Crítica:MÚSICA

Una voz entre las campanas

Bajo el sugestivo título Música y Melancolia, se ha celebrado en el Instituto Francés de Madrid un doble acto alrededor del conpositor e intérprete Llorenç Barber, la presentación de su último disco denominado Linguopharin-conpanology, con una mesa redonda en la que intervinieron arquitectos, filósofos, artistas multomdia y músicos; y un concierto para voz y campanas a cargo del inclasificable artista valenciano

Barber parte de los sonidos cotidianos, de la memoria inmediata, a la hora de realizar sus propuestas sonoras para la voz. La intencionalidad expresiva y en cierto modo abstract...

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Bajo el sugestivo título Música y Melancolia, se ha celebrado en el Instituto Francés de Madrid un doble acto alrededor del conpositor e intérprete Llorenç Barber, la presentación de su último disco denominado Linguopharin-conpanology, con una mesa redonda en la que intervinieron arquitectos, filósofos, artistas multomdia y músicos; y un concierto para voz y campanas a cargo del inclasificable artista valenciano

Barber parte de los sonidos cotidianos, de la memoria inmediata, a la hora de realizar sus propuestas sonoras para la voz. La intencionalidad expresiva y en cierto modo abstracta se alimenta de la ironía. Sus discursos, descontextuálizados y burlones, poseen además una dimensión evocadora entrañable.

Barberidades

Concierto de Llorenç Barber para voz y campanas. Instituto Francés, Madrid, 7 marzo

En Fu, fugaz, Jugajónica para una voz, voz muy so, so, so, solita y sobre todo en Breve ensayo sobre la célebre cuestión del tiempo, Barber nos devuelve, como en un espejo, un entorno lleno de palabras, cuyos valores significantes han sido enriquecidos por ritmos y sonoridades. La capacidad comunicativa y el sentido del espectáculo de Barber contribuye alencantamiento y a la complicidad inmediata.

Hay un concepto musical espacial y envolvente en la utilización de las campanas. Los sonidos fluyen con libertad y el azar es controlado sin opresión. No hay anarquía, sino un tipo de creatividad heredera de una tradición ritual.

.De la Música volante para campanas en movimiento a Manjar, con incorporación de la voz, hay un camino abierto lleno de sorpresas y sugerencias. La música de Barber es a veces callejera, y otras refugio íntimo. Representa una alternativa no por difícil de encasillar menos necesaria para la salud mental y sonora.

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