Tribuna:

Mucho más que un gesto

En los últimos años, la Corrida de la Beneficencia se ha convertido en el acontecimiento taurino más importante del año. Los triunfadores del San Isidro recién acabado eran anunciados para componer un cartel redondo que despertaba gran interés entre la afición y proporcionaba a los seleccionados re muneraciones acordes a su fama. A pesar del éxito de la fórmula, el Centro (le Asuntos Taurinos deja Comunidad de Madrid -organizadores y empresarios del festejo- llevaba años intentando recuperar el originario carácter benéfico de esta corrida, concedido en 1754 por una real pragmática de Fe...

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En los últimos años, la Corrida de la Beneficencia se ha convertido en el acontecimiento taurino más importante del año. Los triunfadores del San Isidro recién acabado eran anunciados para componer un cartel redondo que despertaba gran interés entre la afición y proporcionaba a los seleccionados re muneraciones acordes a su fama. A pesar del éxito de la fórmula, el Centro (le Asuntos Taurinos deja Comunidad de Madrid -organizadores y empresarios del festejo- llevaba años intentando recuperar el originario carácter benéfico de esta corrida, concedido en 1754 por una real pragmática de Fernando VI, sin menoscabo de la importancia de los carteles.

Desde que en 1970 Paco Camino lidió en solitario la Beneficencia ningún coletudo ha bía realizado el gesto de hacerlo en solitario. Por eso, cuando Joselito, al regreso de su temporada americana, realizó este ofrecimiento, abrió la puerta para comenzar una nueva etapa de la corrida. Porque lo de José es mucho más que un gesto de esos que realizan los toreros cuando lo necesitan profesionalmente o cuando, ya encumbrados, quieren corroborar su condición de figura.

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Joselito se encuentra en plena madurez, tras mandar al desholladero a más de mil toros, siendo unánimemente considerado como uno de los toreros punteros; por eso tiene un enorme valor que se encierre con seis toros de ganaderías tan serias como las anunciadas en un momento de su carrera en que no precisa de gestos taurinos.

Pero además el diestro madrileño da un generoso paso adelante que le define como persona renunciando a sus honorarios y constituyendo una fundación para contribuir a la formación de jóvenes sin recursos económicos, fomentar programas sanitarios destinados a la investigación, ayudar a la difusión de los aspectos culturales de la fiesta de los toros y servir de soporte para materializar las ayudas a las familias de los toreros que sufran percances. .

Con todo ello Joselito marca una trayectoria que constituye un reto para sus compañeros de profesión. Se podría decir que todas las grandes figuras mantienen una deuda con la plaza de Madrid, que en su día les dio el espaldarazo definitivo. Joselito inicia una andadura que el Centro de Asuntos Taurinos espera sea seguida por muchos otros en los próximos años para, con ello, poder recuperar el sentido auténtico de esta Corrida de la Beneficencia.

es vicepresidente del consejo del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid.

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