El aplastante peso del EFA

La firma por el ministro de Defensa, Narcís Serra, en noviembre pasado, de la fase de desarrollo del programa Eurofighter Aircraft (EFA) o Avión de Combate Europeo (ACE), en el que España participa con un 13%, condiciona todo el futuro de la investigación militar en nuestro país, e incluso de la investigación a secas. El Gobierno español gastará hasta 1999 un total de 155.000 millones de pesetas en investigaciones desarrolladas con dicho proyecto, es decir, más de lo que gastó en I+D, civil y militar, el pasado año.El programa EFA se llevará casi la mitad, un 41,5%, de las inversiones en inves...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La firma por el ministro de Defensa, Narcís Serra, en noviembre pasado, de la fase de desarrollo del programa Eurofighter Aircraft (EFA) o Avión de Combate Europeo (ACE), en el que España participa con un 13%, condiciona todo el futuro de la investigación militar en nuestro país, e incluso de la investigación a secas. El Gobierno español gastará hasta 1999 un total de 155.000 millones de pesetas en investigaciones desarrolladas con dicho proyecto, es decir, más de lo que gastó en I+D, civil y militar, el pasado año.El programa EFA se llevará casi la mitad, un 41,5%, de las inversiones en investigación militar previstas por el Ministerio de Defensa para la década 1982-1992. De hecho, el fuerte aumento experimentado este año por el programa de I+D de las Fuerzas Armadas, que ha pasado de 23.416 a 49.715 millones de pesetas, cabe atribuirlo casi en exclusiva al pago de la primera letra del Avión de Combate Europeo, que ha supuesto un desembolso de 27.462 millones de pesetas, el 65,8% del presupuesto de investigación milítar.

Más información

El peso económico del programa EFA es tan grande que distorsiona el análisis de la distribución de los gastos de la I+D militar, ya que, por ejemplo, convierte al sector aeronáutico en la estrella indiscutible de la misma, con un 43,4% de los fondos presupuestados hasta 1992, cuando, si se excluye dicho programa, el peso del resto del sector, con menos de 5.000 millones de pesetas, no llega al 2% del total.

Los gastos derivados de la participación en el Avión de Combate Europeo suponen también más de la mitad de los comprometidos, a lo largo de la década que se inició en 1982, en los 24 programas multinacionales de armamento en los que participa España. En total, nuestro país aportará durante dicho período 208.467 millones de pesetas a los programas de la OTAN, lo que quiere decir que sólo un 21,4% del total, en torno a 54.000 millones, se dedicará a proyectos exclusivamente españoles.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En