Un hospital infantil de Londres pierde el mecenazgo de Peter Pan

Peter Pan, el niño que se negó a crecer, ha dejado de proveer fondos a un hospital infantil de Londres. Con el comienzo del año han prescrito los derechos de autor de la obra literaria y dramática cedidos hace medio siglo por el escocés James Barrie, (1860-1937), creador del personaje que sólo tiene a Alicia por rival en la mitología infantil nacida en el Reino Unido. George Cole, el Capitán Garfio de la actual representación de la obra en Londres, cree que un poco de voluntad permitiría a Peter Pan seguir ayudando al Great Ormond Hospital.

Barrie, al que se concedió el título de sir po...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Peter Pan, el niño que se negó a crecer, ha dejado de proveer fondos a un hospital infantil de Londres. Con el comienzo del año han prescrito los derechos de autor de la obra literaria y dramática cedidos hace medio siglo por el escocés James Barrie, (1860-1937), creador del personaje que sólo tiene a Alicia por rival en la mitología infantil nacida en el Reino Unido. George Cole, el Capitán Garfio de la actual representación de la obra en Londres, cree que un poco de voluntad permitiría a Peter Pan seguir ayudando al Great Ormond Hospital.

Barrie, al que se concedió el título de sir por sus aportaciones literarias, determinó que a su muerte los derechos generados por su obra Peter Pan o el niño que no quería crecer (1904), originariamente una obra de teatro que luego el autor transformó en cuento, fueran otorgados al hospital de niños de la calle de Great Ormond, en el literario barrio de Bloomsbury, en el corazón de Londres.Desde entonces, millones de libras -la cantidad es un secreto, conforme a los deseos manifestados por sir James- han servido al hospital para hacerse con la tecnologa de punta aplicada al desarrollo de la medicina infantil. Pero, al cumplirse los 50 años de la desaparición- de Barrie, han prescrito los derechos de autor, y, con ellos, el dorado maná que caía sobre el Great Ormond Hospital (a pesar de Peter Pan, un vetusto edificio necesitado de reformas).

La disociación de Peter Pan con el hospital se produce en el momento en que el centro está inmerso en una campaña para conseguir 30 millones de libras (unos 6.000 millones de pesetas) con las que subsanar las deficiencias creadas por el paso del tiempo. Por ello, el temible Capitán Garfio, a quien Peter Pan cortó el brazo para satisfacción de los cocodrilos, hoy encarnado por un George Cole de buen corazón en la versión teatral que se representa con éxito en Londres, ha sugerido que los futuros productores de Peter Pan... deberán hacer aportaciones voluntarias al hospital para mantener, aunque sólo sea simbólicamente, el legado de Barrie.

Navidad de 1904

Con la cesión de sus derechos de autor, el dramaturgo y periodista Barrie anunció al mundo su previsión de la trascendencia que iba a tener Peter Pan..., su más conocida obra, puesta por primera vez sobre un escenario en la Navidad de 1904 y convertida en el popular cuento siete años más tarde.Peter Pan y la estancia de loshermanos Darling (John, Michel y Wendy) en el País de Nunca Jamás -donde los niños no crecen y viven aventuras con sirenas, indios, piratas y hadas tan pequeñas que no les caben dos sentimientos a la vez- es una historia de larga gestación en la obra de Barrie, muy amigo de los niños, a algunos de los cuales acompañó por los londinenses jardines de Kensington mientras les contaba historias de hadas que luego aparecían en sus escritos para adultos.

El pajarillo blanco, escrito en 1902, es, en ciertos pasajes, casi una recreación de estos paseos, y de él se extrajo Peter Pan en los jardines de Kensington, un cuento que no es el definitivo Peter Pan o el niño que no quería crecer, pero que muestra cómo el personaje ya revoloteaba en la cabeza del escocés.

La obra teatral fue un gran éxito desde el primer momento

-Barrie temía que las dificultades de representar a los niños voladores echara para atrás a los empresarios teatrales y nunca llegara los escenarios- y a ella se han querido asociar grandes nombres, entre los que cabe destacar el de Leonard Bernstein, autor de la música que acompañó a Peter Pan en el Broadway de 1950. El niño que se negó a crecer también se paseó por las pantallas de todo el mundo de la mano de Walt Disney.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En