Un soviético espió en la ONU para Washington

El funcionario soviético Arkady Nikolaievich Sevchenko, que fue vicesecretario general de las Naciones Unidas, suministró durante un periodo de casi tres años, antes de pedir asilo político en EE UU en 1978, información confidencial de la Unión Soviética a los servicios secretos norteamericanos.En sus memorias, que se publicarán próximamente en Estados Unidos, el desertor soviético, que cuenta actualmente 54 años, revela cómo, tras su primer acercamiento a medios oficiales norteamericanos para pedir asilo político, fue obligado a continuar en su puesto en la sede de las Naciones Unidas de Nuev...

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El funcionario soviético Arkady Nikolaievich Sevchenko, que fue vicesecretario general de las Naciones Unidas, suministró durante un periodo de casi tres años, antes de pedir asilo político en EE UU en 1978, información confidencial de la Unión Soviética a los servicios secretos norteamericanos.En sus memorias, que se publicarán próximamente en Estados Unidos, el desertor soviético, que cuenta actualmente 54 años, revela cómo, tras su primer acercamiento a medios oficiales norteamericanos para pedir asilo político, fue obligado a continuar en su puesto en la sede de las Naciones Unidas de Nueva York para suministrar información a la CIA. Sevchenko fue, durante su mandato, la segunda autoridad de la ONU tras el secretario general, Kurt Waldheim.

El libro, titulado Breaking with Moscow (Rompiendo con Moscú), describe las actividades de espionaje de Sevchenko desde 1975 hasta 1978 cuando, tras recibir una orden de regresar a Moscú, su situación se hizo insostenible y le fue concedido el asilo político.

Una de las revelaciones más espectaculares contenidas en el libro es que, en 1969, la URSS estudió la posibilidad de lanzar un ataque nuclear contra China tras un incidente fronterizo. El plan, defendido por dirigentes militares soviéticos, fue desechado por la cúpula civil del Kremlin, que previamente sondeó la reacción estadounidense a esta acción.

La labor de espionaje de Sevchenko, el funcionario soviético de mayor rango exiliado en Occidente, facilitó a la CIA documentos básicos sobre la postura soviética ante la negociación del tratado SALT II e información sobre las pugnas internas del Kremlin.

Seychenko vive ahora, a sus 54 años, cerca de Washington, dedicado a escribir, a pronunciar conferencias y a asesorar ocasionalmente sobre asuntos soviéticos a los servicios secretos de Estados Unidos.

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