Diane Keaton, sobre Woody Allen: “Es mi amigo y sigo creyendo en él”

Kate Winslet lamenta las "malas decisiones" de trabajar con ciertos cineastas

Woody Allen y Diane Keaton en la gala AFI Life Achievement Award el pasado mes de junio.CHRIS PIZZELLO (INVISION/AP)

"Woody Allen es mi amigo y continúo creyendo en él". Diane Keaton se ha convertido este martes en una de las pocas personalidades de Hollywood, sino la única, en salir públicamente en defensa del cineasta, que está en el centro de la polémica por la acusación de su hija adoptiva Dylan Farrow, que asegura que abusó de ella en 1992, cuando tenía siete años, y ha señalado que sigue creyendo en su inocencia.

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"Woody Allen es mi amigo y continúo creyendo en él". Diane Keaton se ha convertido este martes en una de las pocas personalidades de Hollywood, sino la única, en salir públicamente en defensa del cineasta, que está en el centro de la polémica por la acusación de su hija adoptiva Dylan Farrow, que asegura que abusó de ella en 1992, cuando tenía siete años, y ha señalado que sigue creyendo en su inocencia.

Keaton, una de las grandes musas del realizador neoyorquino y protagonista de obras como Annie Hall (1977) y Manhattan (1979) ha tuiteado este mensaje, que acompaña con el vídeo de una entrevista a Woody Allen emitida en 1992 por el programa 60 Minutes en la que este se defiendeEn esa conversación televisiva, Allen negó unas acusaciones que le persiguen desde hace 25 años y que han vuelto a salir a la luz tras la catarata de casos de agresión sexual en Hollywood y el impulso de los movimientos #MeToo (Yo también) y Time's Up (Se acabó el tiempo).

Dylan Farrow, la hija adoptiva de Woody Allen y Mia Farrow, que ahora tiene 32 años, ofreció a mediados de este mes su primera entrevista en televisión, en la que reafirmó sus acusaciones contra el cineasta. "Todo lo que puedo hacer es contar mi verdad y esperar que alguien me crea en lugar de solo escucharme", dijo. La acusación salió a la luz en 1992, en medio de la tormentosa separación de Woody Allen y Mia Farrow en la que la actriz ganó en los tribunales la custodia de sus hijos.

Allen había iniciado en esa misma época una relación con otra hija adoptiva de Farrow, Soon-Yi Previn, que tenía 19 años y con la que se casó en 1997. En 2014, Dylan Farrow envió una carta a The New York Times en la que contaba cómo el realizador había abusado de ella, pero los hechos ya habían prescrito legalmente.

Las declaraciones de Diane Keaton se unen a las recientes afirmaciones de Alec Baldwin, quien opinó que "renunciar" a Woody Allen es "injusto y triste". "¿Es posible apoyar a los supervivientes de la pedofilia y de abusos y acosos sexuales y, al mismo tiempo, creer que Woody Allen es inocente? Así lo creo", escribió en Twitter. Sin embargo, Keaton y Baldwin son sólo una minoría en Hollywood frente a los intérpretes que han mostrado en los últimos días su arrepentimiento y tristeza por haber trabajado con Allen.

Como muestra, Rebecca Hall y Timothée Chalamet donaron sus sueldos correspondientes a sus papeles en películas de Woody Allen, Selena Gómez hizo una importante contribución a Time's Up, y Greta Gerwig dijo tenía remordimientos por haber trabajado en la película To Rome With Love (A Roma con amor, 2012).

Asimismo, Kate Winslet admitió el domingo, en un encuentro con críticos de cine en Londres, que lamenta las "malas decisiones" que tomó al haber trabajado con ciertos cineastas, si bien no los citó por su nombre. Natalie Portman, Mira Sorvino, Colin Firth, Susan Sarandon, Reese Witherspoon o Rachel Brosnahan han jurado no trabajar con Allen en solidaridad con Dylan Farrow. Woody Allen, mientras tanto, insiste en que nunca abusó de su hija adoptiva y acusa a la familia de su expareja Mia Farrow de aprovecharse del momento para reavivar una "denuncia desacreditada".

"Aunque la familia Farrow está cínicamente usando la oportunidad brindada por el movimiento Time's Up para repetir esta denuncia desacreditada, eso no la torna más verdadera hoy que en el pasado", escribió Allen, de 82 años, en un comunicado divulgado el jueves. "Nunca abusé de mi hija, como concluyeron todas las investigaciones hace un cuarto de siglo", añadió.

Pero parece que al veterano actor le está llegando su hora. Amazon Studios, según diversas publicaciones estadounidenses, se está planteando qué hacer con la nueva película del realizador de 82 años, A Rainy Day in New York, que financia íntegramente la productora (ha costado 25 millones de euros). Incluso podría dejarla inédita. Más claro parece que está será su última colaboración, porque el principal valedor de Allen en la compañía, Roy Price, tuvo que dejar la presidencia de la productora en octubre acusado él mismo de abusos sexuales. "Amazon apoyó mis libros, mis películas y mis series. Pero no tengo más relación. Me dan el dinero y yo les hago una película”, se distanció en su momento Allen de Price. Ahora le toca a él.

Después del escándalo en torno al productor Harvey Weinstein, acusado de decenas de casos de agresión sexual, numerosas revelaciones del mismo tipo salpicaron a artistas como Kevin Spacey, Dustin Hoffman, James Franco, Brett Ratner, John Lasseter, Louis C.K. o Bryan Singer.

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