Los padres del Ozempic ganan el premio Fronteras del Conocimiento por encontrar la clave para tratar la obesidad y la diabetes
La Fundación BBVA reconoce las investigaciones del canadiense Daniel Drucker, el danés Jens Holst y los estadounidenses Svetlana Mojsov y Joel Habener que han revolucionado el mercado de los fármacos
El trabajo conjunto de Daniel Drucker, Joel Habener, Svetlana Mojsov y Jens Holst ha sido reconocido este miércoles con el premio Fronteras del Conocimiento de la Fundación BBVA en la categoría de Biología y Biomedicina, por sentar los fundamentos biológicos de la reciente revolución farmacológica contra la diabetes y la obesidad. Las distintas investigaciones de estos científicos lograron revelar la función de la hormona GLP-1, que tiene un papel clave tanto en el mantenimiento de los niveles de glucosa en sangre como en la regulación de la sensación de apetito. Sus investigaciones han culminado una nueva generación de fármacos superventas, como el Ozempic, y tienen potencial para el desarrollo de nuevos medicamentos contra enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas e incluso para el tratamiento de trastornos por adicción, cuya eficacia todavía se está investigando.
Daniel Ducker, que trabaja en el Hospital Monte Sinaí en Toronto (Canadá), dijo tras conocer el galardón que “la obesidad ha estado siempre muy estigmatizada”. Y agregó que “a muchos pacientes se los ha culpado por su dificultad para bajar de peso, pero estos fármacos han demostrado que, a veces, las personas simplemente necesitan ayuda”. El científico también hizo referencia a los problemas de desabastecimiento de este tipo de medicamentos que muchos países afrontan, entre los que se incluye España, por una avalancha de recetas. “La ciencia solo es útil si la innovación es accesible para todos. Tenemos que asegurarnos que estos fármacos lleguen a quienes los necesitan”, explicó. Ducker le reclamó a la industria farmacológica que debe anticiparse a la demanda de este tipo de tratamientos porque es probable que aumente en los próximos años.
Durante la ceremonia de anuncio de los ganadores, Svetlana Mojsov, de la Universidad Rockefeller (EE UU) e ignorada en galardones anteriores hasta que recibió el Princesa de Asturias, hizo hincapié en todo el potencial médico que tiene el descubrimiento de la función biológica de la GLP-1, un hallazgo que se remonta a la década de 1980, cuando ella logró sintetizarla en su laboratorio. Entonces logró demostrar que, en pequeñas cantidades, estimulaba la producción de insulina en el páncreas. Luego encontraron que también influye en la regulación del apetito, y las últimas investigaciones apuntan a que tiene un gran potencial para combatir enfermedades neurológicas, como el párkinson y el alzhéimer, porque tiene efectos antiinflamatorios sobre el cerebro. A su vez, como estos tratamientos trabajan sobre el centro de recompensa del cerebro e inhiben el estímulo que produce la comida para suprimir el apetito, nuevas investigaciones están explorando si podrían también inhibir la dependencia del alcohol y otras sustancias adictivas como el tabaco. “El potencial es muy grande”, aseguró Mojsov.
Miles de personas en el mundo reciben los medicamentos surgidos de la revolución científica iniciada por los cuatro galardonados. Sin embargo, durante el anuncio del reconocimiento, los investigadores mencionaron que los fármacos no pueden ser la única respuesta a epidemias como pueden ser la diabetes tipo 2 y la obesidad. “Necesitamos desplegar todas las herramientas que sean necesarias para frenar este problema”, aseguró Drucker. Entre ellas, mencionó un aumento de los impuestos a productos como las bebidas azucaradas —responsables de dos millones de casos de diabetes y un millón de diagnósticos de enfermedades cardiovasculares al año— y educación para prevenir el consumo de azúcar. Algo similar a lo hecho anteriormente con las políticas en contra del consumo de tabaco.
Estos investigadores ya habían sido reconocidos en varias oportunidades en el último año. Por ejemplo, recibieron en Canadá el Premio Internacional Gairdner y en España el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica. Este nuevo galardón está dotado con 400.000 euros y la ceremonia de entrega oficial está prevista para el mes de junio. A lo largo de la historia de los premios, 12 de los galardonados en las 17 ediciones han recibido luego el premio Nobel.