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Los 12 días en los que Perú no tuvo presidenta al frente

El ex primer ministro Alberto Otárola confirma que la mandataria se ausentó entre el 28 de junio y el 9 de julio de 2023 para operarse de las “fosas nasales” sin comunicarlo

Dina Boluarte, presidenta de Perú
Dina Boluarte en Lima, Perú, en julio de 2024.Ken Roger (Getty Images)
Renzo Gómez Vega

Dina Boluarte será recordada no solo por sus prolongados silencios, su colección de relojes Rolex o su 3% de aprobación, un récord difícil de batir. La primera presidenta del Perú pasará a la historia por haberse ausentado de Palacio para someterse a una cirugía estética en el secretismo más absoluto. Desde hace meses la prensa le seguía la pista a una revelación del semanario Hildebrandt en sus trece: que entre el 28 de junio y el 9 de julio del 2023, la jefa de Estado no estuvo presente en ningún evento público. Durante ese tiempo, se sometió a una rinoplastia y a procedimientos de rejuvenecimiento facial.

Entonces, el Gobierno ya había sufrido el sacudón del destape del Rolexgate y, además, la casa de Boluarte había sido allanada en Semana Santa. La presidenta, quien ha hecho del silencio una política de Estado, eludió a la prensa y mandó al frente a su vocero, Fredy Hinojosa. “No me pronunciaré sobre aquellos actos que formen parte de la esfera privada de un ciudadano, y más aún de la presidenta [...] La Constitución establece un derecho fundamental de todo ciudadano: el derecho a la intimidad personal, este derecho también le asiste a la presidenta”, dijo Hinojosa para salir del paso. Pero no convenció a la ciudadanía y la duda quedó instalada.

Este martes, siete meses después, el expresidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola confirmó uno de los secretos mejor guardados de la mandataria. Ante la Comisión de Fiscalización del Congreso, el abogado que en su momento fue considerado como el escudero más leal de Boluarte la delató. Luego recalcó que la sucesora de Pedro Castillo cumplió con su investidura a pesar de estar convaleciente. “La señora presidenta de la República en las fechas indicadas pasó por un procedimiento quirúrgico. Pero, como le sucede a cualquier persona, no estuvo desatendiendo sus labores que le competían al cargo y me consta porque yo fui presidente del Consejo de Ministros y ella estuvo en permanente contacto con el suscrito. Tuvimos que hacer una reunión virtual del Consejo de Ministros y en todo momento estuvo atenta al devenir de la Administración pública”, confesó.

Otárola, quien se reencontró con los medios de comunicación tras su salida del Ejecutivo por un caso de acoso, ofreció más detalles: “Yo tuve una comunicación al día siguiente [de la operación] con la presidenta, se notaba por la voz que había sido intervenida evidentemente de las fosas nasales”. Otárola evitó responder si había sido pagada con las arcas del Estado, pero sí admitió conocer al cirujano de Dina Boluarte, Mario Cabani Ravello. El doctor es famoso por haber atendido en su quirófano a personajes de la farándula peruana como la conductora de televisión Magaly Medina.

En las redes sociales de inmediato surgieron varias preguntas: al no contar con un vicepresidente, ¿quién gobernó al Perú mientras Dina Boluarte estuvo anestesiada? ¿Por qué no solicitó una autorización al Congreso? ¿Se puede gobernar virtualmente desde una clínica, en estado de convalecencia? ¿Todos los ministros sabían la verdad? ¿La mandataria despachó fuera de Palacio? ¿Esta negligencia es causal de vacancia?

Carlos Zeballos, integrante de la Comisión de Fiscalización, afirma que la presidenta sí habría incurrido en un hecho que podría derivar en una moción de vacancia al dejar descabezado al Gobierno. “No comunicó al Consejo de Ministros, no existió algún certificado médico de descanso, cuánto duró la operación y la recuperación. Allí habría una negligencia y una irresponsabilidad de parte de la presidenta porque dejó acéfalo el Gobierno así sea por horas. Eso no lo contempla la Constitución. Hay un vacío legal. Pero ella no puede dejar acéfalo el Gobierno, porque no tiene vicepresidente. Vamos a solicitar la documentación necesaria. De hallar las evidencias concretas habría una causal de vacancia y se tendría que armar una moción”, sostuvo.

Como se recuerda, Pedro Castillo llegó al poder a mediados de 2021 con Dina Boluarte en su plancha, pero sin un segundo vicepresidente. Después del fallido autogolpe del profesor sindical y su posterior reclusión, Boluarte asumió la presidencia, aunque sin nadie que la sucediera. A mediados de 2023, el Congreso aprobó una ley para que la mandataria despachara virtualmente en caso de que viajara al exterior. Si bien Otárola insiste en que Boluarte no desatendió sus funciones, en el caso de que haya realizado gestiones oficiales fuera de Palacio habría caído en la ilegalidad. “No pudo haber despachado de manera virtual porque no contaba con la autorización del Parlamento”, enfatiza el congresista Carlos Zeballos.

En el libro que escarba el escándalo del Rolexgate, el periodista Ernesto Cabral narra el contexto en el que Boluarte tomó la decisión de pasar por el quirófano. “Le incomodaban sus ojeras, bolsas y patas de gallo. También quería deshacerse de las líneas de expresión en la frente y las manchas del rostro. Y lo más importante: despojarse de la curvatura de su nariz aguileña”, cuenta. Pero, además, revela cómo se intentó encubrir la operación desde Palacio. El editor del podcast La Encerrona, Jonathan Castro, verificó que en los doce días que la jefa de Estado se ausentó, las cuentas oficiales del Despacho Presidencial colgaron fotos donde ella participaba en distintos eventos. El pequeño detalle es que eran pasados.

“El 1 de julio, por ejemplo, la cuenta de Twitter de la Presidencia publicó una imagen de Boluarte junto a alumnos de un colegio de Lambayeque. Sin embargo en la cuenta de Flickr de la Presidencia se pueden ver las mismas imágenes, subidas el 23 de junio. Y así, varios intentos de confundir. La agenda presidencial, mientras tanto, permaneció vacía. En todo ese tiempo su única aparición fue virtual y a puertas cerradas en una sesión del Consejo de Ministros. Casi no habló: a los ministros les habían dicho que tenía faringitis”, sostienen.

En noviembre de 2021, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, se sometió a una colonoscopia y le transfirió el poder a Kamala Harris durante una hora y veinticinco minutos, el tiempo que estuvo bajo anestesia. Dina Boluarte, claramente, tomó otro camino.


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Sobre la firma

Renzo Gómez Vega
Periodista y escritor. Ha escrito en los medios peruanos 'El Comercio', 'La República', el semanario 'Hildebrandt en sus Trece' y 'Salud con Lupa'. Fundador de la revista digital 'Sudor'.
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