James Rodríguez regresa a Madrid con el Rayo Vallecano

El mejor jugador de la reciente Copa América de Estados Unidos se muda a Vallecas. James Rodríguez regresa con 33 años recién cumplidos a España, el mismo lugar donde se aferró por varias campañas a su sueño de triunfar en el Real Madrid. Después de haber rescindido su contrato con el São Paulo, el diez colombiano, goleador del Mundial del 2014 y ahora capitán de su selección llegada la madurez, llega al Rayo Vallecano en la temporada del centenario, como ha celebrado el club en sus redes sociales al oficializar el fichaje.

James sigue la estela de Radamel Falcao García al decidirse por el equipo madrileño, dirigido por Iñigo Pérez. También cumple su anhelo de volver al fútbol europeo después de coronar una extraordinaria Copa América, en la que confirmó la vigencia de su zurda al llevar a su selección a una final que perdió en el último suspiro con la Argentina de Messi. El mediapunta repartió un número récord de seis asistencias y fue escogido como el mejor jugador del torneo. Eso le valió un refugio en Vallecas a pocos días del regreso de las eliminatorias sudamericanas al Mundial de Canadá, México y Estados Unidos, en las que Colombia visita a Perú y recibe a Argentina –con sed de revancha– a comienzos de septiembre.

El otrora precoz prodigio colombiano acumula goles y asistencias en una trayectoria que lo ha llevado a las ligas de Argentina, Portugal, Francia, España, Alemania, Inglaterra, Catar, Grecia y Brasil, pero también contratos que se han quedado truncos por una u otra razón. Tras rescindir con São Paulo, ya son cuatro ocasiones consecutivas en las que abandona anticipadamente su club desde que se despidió de La Liga en 2020. Del Everton de la Premier League se fue un año antes de acabar su vínculo para fichar por el Al-Rayyan catarí, en lo que parecía un ocaso prematuro. Pero James rescindió también entonces para recabar en el Olympiakos. Allí dio señales de que había vuelto a ser el de antes, pero se marchó antes de que acabara la temporada. Después de tres meses sin club, llegó hace poco más de un año a Brasil, donde nunca tuvo continuidad.

Su esperada redención llegó con Colombia, donde ya suma más de cien partidos. Diez años después del Mundial de Brasil en el que se coronó goleador, los cafeteros todavía se mueven al ritmo de su diez, ahora acompañado por Luis Díaz, el extremo del Liverpool que no ha ocultado su admiración por el capitán, cinco años mayor. Puede que la fortuna se haya torcido en sus últimos clubes ―apenas jugó un puñado de partidos en este 2024 con São Paulo―, pero con la camiseta amarilla James siempre se ha sentido arropado.

La selección de Néstor Lorenzo vive un momento dulce, es la única que no ha perdido en las primeras seis fechas de las eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de Norteamérica 2026, en las que incluso se dio el lujo de tumbar en Barranquilla a Brasil (2-1). En la Copa América confirmó ese gran momento, con un rejuvenecido James en plan estelar. Dio dos pases de gol en el debut contra Paraguay (2-1), otro en la victoria sobre Costa Rica (3-0), dos más en la goleada sobre Panamá (5-0), en la que también anotó de penal, y uno más en el sufrido triunfo de semifinales sobre Uruguay (1-0). La mitad de los 12 goles de Colombia surgieron de sus pases, y otro más fue suyo. La tricolor solo se rindió ante la Argentina campeona del mundo, con un solitario tanto de Lautaro Martínez en el tiempo suplementario de la final.

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