El VI Congreso del Partido Comunista era el primero que se celebraba sin estar Fidel Castro en el poder, pero el mandatario asistió como invitado. Su hermano Raúl Castro tomó el relevo como secretario general del Partido y además en esa reunión Raúl propusó que se limitase el mandato de los presidentes cubanos a un máximo de 10 años.