La receta del éxito está en la gastronomía internacional
Con las recetas de sus países de origen bajo el brazo conquistaron su espacio en Madrid. Un arquitecto, un abogado, dos médicos, una profesora, un directivo y una jinete abandonaron sus respectivas profesiones cuando emigraron a la capital de España. Movidos por el amor a la gastronomía, coinciden en resaltar las expectativas de negocio en una ciudad que se ha revelado perfecta para triunfar con la comida internacional. Así han llegado a saborear el éxito.
Dana Knowlers, copropietaria de Tate of America, posa frente a su tienda de la calle Serrano.Nunzio Mouriello, de Quadra Panis, en la tienda de la Plaza de Oriente.Carlos Pascal, junto a dos de sus empleados, en el local de General Pardiñas.Caroline Svensson en una de sus tiendas Oomuombo en Núñez de Balboa.Azmina Khanbhai, ante una selección de sus mejores polos artesanos.La historia de la familia Goicoechea es la de un viaje de ida y vuelta. Un periplo que empezó cuando sus abuelos marcharon exiliados desde el País Vasco a Venezuela tras la Guerra Civil. La vida trajo de regreso a Madrid a su nieto Andoni (Caracas, 1987) en 2012. Este joven decidió acabar allí la carrera de Medicina y consiguió una plaza en el Hospital La Paz, pero en 2013 la dejó. "Me aburría trabajar solo de 9.00 a 15.00 y decidí coger el traspaso de un bar", recuerda. El éxito de unas hamburguesas que mezclan lo vasco y lo venelozano —combinan ron o mango con chistorra y pimientos del piquillo— devolvió a la familia Goicoechea a España. Acompañados por el triunfo de su hijo, que en cinco años ha abierto 10 restaurantes en Madrid, sus padres y su hermana volvieron a casa.