10 fotosEstocada a la polémica taurinaActivistas antitaurinos y algunos partidos políticos llevan años librando una batalla para prohibir fiestas tradicionales en las que, critican, existe maltrato animal Madrid - 05 ago 2015 - 19:44CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceDetractores de las corridas se manifiestan a las puertas del Parlamento de Cataluña en el día que se votaba la prohibición de los toros en esa comunidad. La ley entró en vigor el 1 de enero de 2012.TejederasGrada semivacía de la Monumental de Barcelona en 2010. Era la primera corrida después de prohibirse los toros en Cataluña, una ley que se comenzó a aplicar en 2012.Susanna SaezEl torero José Tomás recoge unas flores y una bandera catalana antes del inicio de la última corrida de toros celebrada en la plaza Monumental de Barcelona. A pesar de la prohibición, la polémica en Cataluña entre aficionados y detractores continúa.TejederasEl torero catalán Serafín Marín marcha llevado a hombros por la Gran Vía de Barcelona camino de su hotel tras la última corrida celebrada en la Monumental de la Ciudad Condal.EFEDos turistas se hacen fotografías en la plaza de toros Monumental de Barcelona, vacía, el día siguiente de la celebración de la última corrida en el coso catalán.TejederasImagen de la última vez que se celebraron corridas de toros en San Sebastián, en agosto de 2012. Sin Bildu, volverán los toros a la ciudad.Jesús UriarteFiestas de los 'bous a la mar' en la ciudad alicantina de Denia. Se trata de una celebración de interés turístico nacional en la que los participantes intentan tirar las vaquillas al agua, lo que ha generado numerosas críticas.José JordánIncidentes con antitaurinos y el ganador del trofeo del Toro de la Vega de Tordesillas, Álvaro Martín, en 2014.LUIS SEVILLANODos hombres en los 'correbous' de Campredo, en Tarragona. Los grupos antitaurinos tachan de "salvajada" estas celebraciones en las que se incendian los cuernos del toro. Consideran que es maltrato animal.Josep Lluis SellartUn manifestante antitaurino en Bogotá, donde se extiende la polémica.Mauricio Dueñas Castañeda (EFE)