Líderes de 2013
Estas son miradas de autor hacia los secretos de su liderazgo. Desde el discurso revolucionario del nuevo Pontífice, hasta el carisma global de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y la reconquista de las urnas en Chile de Michelle Bachelet. Grandes personajes iberoamericanos que han dejado grabada a fuego su huella durante el año que termina.
Por. Jorge Capitanich.
El papa Francisco ha significado para la humanidad la aparición de un liderazgo extraordinario para la santa Iglesia católica destinado a transformar estructuralmente la relación de los fieles con la institución eclesiástica en el marco de un modelo de comunicación directa, abierta y transparente. Conocí al entonces cardenal Bergoglio como jefe de Gabinete de Ministros en la peor crisis social, productiva y económica, en la que la Iglesia tuvo un rol trascendente en la construcción del diálogo argentino para la búsqueda de un camino para superar antinomias y bregar en la vía de una solución a los problemas que padecíamos los argentinos. Luego profundicé el vínculo mediante mi rol de senador nacional representando a mi provincia en cuestiones de agenda legislativa, principalmente en aquellas sensibles para la Iglesia. Las conversaciones profundas me permitieron ver y observar el compromiso con el país y la humanidad. La opción preferencial por los pobres, la humildad y sencillez, la vocación por el diálogo y la unidad en la diversidad constituyen sus ejes principales. Existen en todo el mundo aproximadamente 1.200 millones de católicos entre 2.000 millones de cristianos. Y el desafío más importante de su papado consiste precisamente en interpretar los sentimientos colectivos de la grey católica, esto es, una Iglesia pobre para los pobres. He tenido la oportunidad de participar de una misa en Santa Marta, de un desayuno y luego de su homilía en la plaza de San Pedro, y sentí la emoción de un trato afable y fraterno, de una persona que es capaz de testimoniar su amistad más profunda iluminado por el Espíritu Santo. Francisco constituye un símbolo de la ética de la convicción y la responsabilidad, pero también, y al mismo tiempo, un símbolo de la estética como el continente de la ética a partir de la gestualidad que se convierte en icono y empatía social. La austeridad, la humildad, la sencillez marcan un sendero de su apostolado. Cada cierto tiempo escribo una carta o un correo electrónico y el papa Francisco responde rigurosamente con su toque y distinción personal que recuerda lugares y personas mediante el uso de su infalible memoria. Quizá sea el tiempo de una convocatoria a la humanidad para promover una verdadera revolución de las conciencias de las personas en un mundo injusto y desigual. Nuestro papa Francisco marca su impronta en un mundo en donde el 1% de la población concentra el 43% de los ingresos, mientras que el 50% restante, tan solo el 2%; o sea, 1.200 personas poseen el ingreso de 1.658 millones de personas. Un mundo donde hay 871 millones de personas con hambre, donde más de 1.000 millones se encuentran en la indigencia, y cerca de 3.000 millones, en la pobreza. Un mundo en donde 900 millones de personas no tienen agua potable, 1.400 millones carecen de acceso a la energía eléctrica y 2.160 millones no poseen instalaciones sanitarias. Esta es la verdadera revolución del ser. El cambio de las conciencias de las personas para construir una civilización más justa.
Jorge Capitanich es el jefe de Gabinete de Ministros de Argentina.
Polaris
Por Leonardo Boff
Francisco, obispo de Roma y papa, es más que un nombre. Es un nuevo proyecto de mundo y de Iglesia. Frente a una humanidad profundamente dividida, en la que los ricos se defienden contra los pobres, reafirma la unidad de la familia humana. Frente a autoridades que se cercan de sofisticados aparatos de seguridad, él se expone en carro popular abierto para tocar al pueblo y ser tocado por él. Frente al recurso de la guerra como solución a los problemas mundiales, propone el diálogo abierto sin fronteras ideológicas y religiosas. Frente a la tiranía del sistema económico que mata y que hace del ser humano un bien de consumo que se pude usar y luego tirar, recuerda la antigua tradición de que “no compartir con los pobres los propios bienes es robarles y quitarles la vida”. Frente un mundo marcado por crisis, miedos y amenazas a la vida, habla de alegría, de belleza, de esperanza y de cuidado de la madre tierra. Con referencia a la Iglesia, la liberó de un largo invierno. La atmósfera es de una alegre primavera. En vez de una Iglesia-fortaleza, encerrada en sí misma, quiere una Iglesia-casa abierta a todos sin fiscales de la aduana de la fe. Entiende la Iglesia como un hospital de campaña para curar heridas. Afirma que “el amor viene antes de los dogmas, y el servicio a los pobres, antes de las doctrinas”. Exige de los pastores una “revolución de la ternura”. La esencia del servicio pastoral es la proximidad, el encuentro, la misericordia, el hacer arder el corazón y tener un “olor de ovejas” y no imponer doctrinas. Su proyecto de Iglesia pobre y evangélica es la clave de una conversión pastoral. Anuncia algo inaudito: la reforma estructural de la Iglesia y una conversión del papado para las cuales pide sugerencias a los fieles. En una palabra, se dejó inspirar por el Jesús histórico, misericordioso, pobre y liberador. Así se hace una referencia de humanidad para todo el mundo.
Leonardo Boff es ecoteólogo de la liberación en Río de Janeiro (Brasil).
Polaris
Por Luiz Inácio.Lula da Silva.
Si tuviera que elegir una palabra que definiera el carácter de la presidenta Dilma Rousseff, esa sería coraje. Esta compañera luchó desde muy joven para transformar Brasil, para mejorar las condiciones de vida de la gente más humilde. Fue perseguida, encarcelada y torturada durante la dictadura, pero nunca abandonó sus ideas. En una sociedad acostumbrada a ver siempre a hombres en los puestos dirigentes, ella fue la primera mujer delegada de Hacienda de su región, la primera ministra de Minas y Energía de Brasil, la primera jefa de la Casa Civil, la primera presidenta. Durante mi Gobierno, reorganizó el sector de la energía llevando la electricidad a tres millones de hogares de las zonas rurales. Dirigió el mayor programa de infraestructuras de nuestra época que garantizó el crecimiento económico con una gran inclusión social. Durante su Gobierno, el país alcanzó la cifra de 36 millones de personas rescatadas de la miseria absoluta. En medio de una crisis mundial, el Brasil de la presidenta Dilma es el país más empeñado en la lucha contra el paro, que cayó hasta el 5,2%. 2014 será un gran año para Brasil, y no solo por la organización de la Copa del Mundo de fútbol. El país recogerá los frutos que la presidenta Dilma ha sembrado: la explotación del petróleo del embolsamiento del pré-sal; las concesiones de aeropuertos, de la red ferro-viaria y de los puertos; las grandes inversiones en educación, sanidad y saneamiento. Será el año del reconocimiento de la seriedad y competencia de esta mujer brasileña de tanto coraje.
L. I. Lula da Silva es expresidente de Brasil. Traducción de José Manuel Revuelta.
Uly Martín
Por Rafael Gumucio.
Hija de un general de aviación torturado por sus compañeros de armas. Arrestada y exiliada ella misma, Michelle Bachelet Jeria escogió comprender la dictadura desde el lado de los niños. En los años ochenta se especializó en atender a menores de edad víctimas de la violencia política. Fue su forma de sanar sus heridas o, al menos, comprenderlas y perdonarlas. Eternamente presente en el corazón de los chilenos, incluso cuando se fue a vivir y a trabajar a Nueva York, Michelle Bachelet ha logrado conectar como nadie antes con el niño asustado que habita en cada chileno. Quizá lo logra porque no solo sabe jugar, sonreír o bailar, sino que sabe el momento exacto en que el niño que nos habita necesita que le hablen como si fuera un adulto. Su campaña puede hoy plantear reformas y cambios que su Gobierno no quiso abordar, la continuidad de esa herida de infancia que sabe sanar como pocos, explica la fidelidad inaudita en la historia reciente que le prodigan los electores chilenos.
Rafael Gumucio es escritor chileno.
Platon
Por Felipe González.
Si hubiera un método para definir la identidad iberoamericana y necesitáramos encarnarla, nos encontraríamos con Enrique Iglesias. Él tiene un origen asturiano y su vida política ha sido uruguaya, en el Gobierno de Sanguinetti, dedicado a pilotar la política exterior haciéndola mucho más grande que la dimensión de su país. Ha dirigido el Banco Interamericano de Desarrollo durante muchos años, con tal inteligencia y conocimiento de la realidad y sus necesidades que parecía difícil sustituirlo. Su sensibilidad y buen hacer lo llevaron a la Secretaría de las Cumbres Iberoamericanas y, como ha ocurrido en cada cargo que ocupó, nos parecía que estaba diseñado para hacerlo. De nuevo hemos visto lo difícil que resulta encontrar un sustituto. Es iberoamericano, por sentimiento de pertenencia a esa comunidad compleja, que une las dos orillas del Atlántico, y por dedicación, con entrega plena, con elegancia en el trato con líderes muy diferentes entre sí y, sobre todo, con eficacia para coordinar y convencer a todos. Me honro con su amistad y disfruto compartiendo todo tipo de encuentros con este iberoamericano excepcional.
Felipe González es expresidente del Gobierno.
Bernardo Pérez
Por Juan Jesús Aznárez.
Lejos de resignarse, sumándose al fatalismo padecido por la mayoría de las víctimas de la delincuencia común en Honduras, el asesinato de su hijo a manos de la policía, en octubre de 2012, llevó a Julieta Castellanos, rectora de la principal Universidad Nacional de Tegucigalpa, a una activa sublevación contra la corrupción y la impunidad que está rindiendo sus frutos entre la ciudadanía. Valientemente, sin miedo al poder asociado al hampa, en el país con más homicidios del mundo, la cruzada de la madre comenzó el día en que su hijo Rafael Alejando, de 22 años, y su amigo Carlos, de 24, fueron asesinados por policías ladrones. Pero el activismo trascendió la circunstancia personal para adentrarse en el tuétano de un problema de Estado. La rectora Julieta Castellanos denuncia públicamente, sin ambages tras la tragedia que ha vivido en carne propia, la putrefacción en los cuerpos de seguridad, nombra a los peores y exige del Gobierno liderazgo, compromiso y firmeza en la movilización de todos contra la lacra.
Juan Jesús Aznárez es periodista de EL PAÍS.
Carlos Pérez (NYT)
Por Ollanta Humala.
Hemos coincidido con el presidente Peña Nieto en diversas actividades protocolares y no protocolares, y siempre me ha llamado la atención su espíritu joven, su decisión de buscar cambios y su identificación con los sectores más necesitados de su país. Recién electo, llegó a Lima en compañía de su esposa y compartimos algunos momentos de reflexión sobre el futuro de la región y, sobre todo, del bloque que conformamos junto con Chile y Colombia: la Alianza del Pacífico; un bloque que avanza no solo en temas de integración comercial, sino también en aspectos muy importantes para la unión de nuestros pueblos. Nos complace que compartamos el mismo objetivo de alcanzar la inclusión social para seguir creciendo y dar así un gran salto en el mundo, como latinoamericanos y países hermanos. Reconocemos y saludamos la ardua tarea de Peña Nieto en las reformas medulares que está emprendiendo, las mismas que llevan al pueblo mexicano por el camino del desarrollo y de la paz.
Ollanta Humala es presidente de Perú.
Zuma Press
Por Rafael Nadal.
España vive momentos complicados, días marcados por la crisis económica mundial, por el paro o por la corrupción. En consecuencia, la imagen del país en el exterior no ha atravesado su mejor momento. Es por eso que tener a alguien como el Príncipe de Asturias representando a España es tener a alguien que ayuda al país a ser mejor país. Uno de sus valores es la seriedad, y otro, la cercanía que siempre transmite. Personalmente tengo muy buenos recuerdos de su apoyo; el último, en su presencia en la final de este año en Roland Garros. Don Felipe es además una persona muy preparada, con una muy buena imagen que nos representa alrededor del mundo y contribuye a trasladar una imagen positiva de España. En esa labor de representación y de imagen exterior ha tenido un gran ejemplo para ayudarle a cumplir sus objetivos: el Rey, que ha sido muy bueno para nuestro país y una referencia para que él siga el mismo camino en la responsabilidad de representar a España.
Rafael Nada es tenista.
James Rajotte
Por Enrique Peña Nieto.
Es un honor comentar la trayectoria y logros de uno de los líderes actuales más destacados de América Latina, el presidente de Perú. Con su visión, espíritu reformista y compromiso con las mejores causas de la humanidad, Ollanta Humala está consolidando el desarrollo económico de su país y lo proyecta positivamente en el escenario internacional. Con sus acciones de gobierno, hace honor a su nombre, que en quechua significa “el guerrero que todo lo ve”. Así es, el presidente Humala ha sido un guerrero que no desvía la mirada de los desafíos sociales de Perú, como la lucha contra la pobreza, el hambre y la desigualdad, flagelos que continúan siendo retos apremiantes en nuestros países latinoamericanos. Ollanta Humala se formó en la disciplina, la eficacia y el amor a la patria que caracterizan a las Fuerzas Armadas. Como presidente, ha logrado un elevado crecimiento económico para su país y ha impulsado iniciativas sociales encaminadas a mejorar las condiciones de vida de la población en los ámbitos educativo, alimentario y agrícola; así como a fomentar el empleo y la creación de infraestructura. Junto con Bolivia y otros países hermanos de la región, logró que la Organización para la Alimentación y la Agricultura declarara 2013 como Año Internacional de la Quinua, en reconocimiento a la herencia milenaria de los pueblos andinos y para promover el valor de su cultura en el mundo. Reflejo de su visión internacional, hoy es muy fraterna y positiva la relación que existe entre Perú y México. Ambas naciones hemos acordado una asociación estratégica bilateral y, junto a Colombia y Chile, estamos consolidando la Alianza del Pacífico como un espacio de integración profunda, abierta e incluyente que propicia la libre movilidad de personas, bienes, capitales y servicios entre nuestros países. Por su liderazgo nacional e internacional, su elevado compromiso social y el renovado impulso que ha dado a Perú en el mundo, el presidente Humala es, merecidamente, uno de los personajes iberoamericanos más destacados de 2013. Enhorabuena.
Enrique Peña Nieto es presidente de México.
Vincent Boisot (Redux Pictures)
Por M. Á. Bastenier.
Podría creerse que tanta originalidad no es natural. El presidente uruguayo, José Mujica, de 78 años, es una antología de la anti-convencionalidad. Vive en un ranchito que la discreción llamaría austero, y el ojo clínico, ruinoso; conduce su propio coche, un Volkswagen que debió de ser de los primeros de fábrica; tiene una perra coja que en el cómputo perruno es aún más vieja que su amo; y practica la cocina de autor porque se prepara él mismo su plato preferido: bife con cebolla. En privado, pero a micrófono abierto, decía, tras una dura sesión con la presidenta argentina: “Esta vieja es peor que el tuerto”, o sea, Néstor Kirchner, anterior presidente, del que había enviudado Cristina Fernández. Y en público: “No compramos con plata, sino con el tiempo que tardamos en ganarlo… Hay que dar tiempo a la vida”. Sabio, chófer y cocinero, pero, sobre todo, humanista del saber cotidiano.
M. Á. Bastenier es periodista de EL PAÍS.
L. Maximiliano (Redux Pictures)
Por Juan Manuel. Santos.
Señorío, inteligencia, capacidad de conciliación, altura intelectual. Esas son algunas de las características de Humberto de la Calle, un abogado caldense que ha sido protagonista –por sus méritos indiscutibles– de los momentos cruciales del país en el último cuarto de siglo. Desde los cargos más diversos, como registrador del Estado Civil, magistrado de la Corte Suprema, ministro de Gobierno y luego del Interior, vicepresidente de la República y embajador, De la Calle ha demostrado sensatez y lucidez, además de una capacidad literaria y provocadora que le viene de sus tiempos como nadaísta (“de las divisiones inferiores”, según él mismo dice), cuando fue miembro de esa corriente irreverente de escritores que sacudió la moral provinciana de la Colombia de los sesenta. De la Calle, además, estuvo en el nacimiento de nuestra actual Constitución como organizador y principal interlocutor de la Asamblea Constituyente, y es hoy uno de los colombianos que más conoce nuestra carta política. También participó en las negociaciones con la Coordinadora Guerrillera que reunía a las FARC, el EPL y el ELN, que se llevaron a cabo en Caracas en 1991 y en Tlaxcala (México) en 1992. Por eso –por su experiencia y su talante– no dudé un minuto en ponerlo al frente del equipo negociador del Gobierno que hoy conversa con las FARC en La Habana para buscar la terminación de un conflicto que ha desangrado al país por medio siglo. Los colombianos sabemos que nuestro mayor anhelo, nuestra tarea más urgente, que es la consecución de la paz, está en manos expertas, en manos prudentes, en las mejores.
Juan Manuel Santos es presidente de Colombia.
A. Roque (Getty)
Por Rigoberta Menchú.
Hace 14 años, un jueves 2 de diciembre de 1999, presenté denuncia ante el Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, en la villa de Madrid (España), por violaciones de derechos humanos dirigidas a la población maya, de los delitos de terrorismo de Estado, crímenes de guerra, genocidio, deberes contra la humanidad cometidos por el ejército en contubernio con el poder económico, cronológicamente al tiempo de “guerra que azotó durante 36 años a Guatemala” y más concretamente al periodo investigado por la Comisión para el Esclarecimiento Histórico (CEH), creada en el ámbito de los Acuerdos de Paz de Oslo en 1994, periodo que comprende los años 1962 a 1996. Debido a la impunidad que impera en mi país, resoluciones deplorables de juzgados menores y mayor jerarquía del organismo judicial, caso concreto de la quema de la Embajada de España, han pasado 33 años sin que se haya dictado sentencia. Admiro la valentía y convicción de Almudena Bernabéu. Ella es un prototipo en la justicia de llevar el proceso hasta las últimas consecuencias. Nosotros, las víctimas, queremos ver una sentencia con el debido proceso. El presente caso es un proyecto de vida al que deseo lo mejor de los éxitos en los tribunales.
Rigoberta Menchú Tum es premio Nobel de la Paz y embajadora de la Unesco.
Sofía Moro